El Palacio de Eventos con sede en Maracaibo se convertirá este 26 de junio en un escenario de oración por el país con “Impacto de Dios” 2.016, una actividad en la que el pueblo cristiano se levantará con el firme propósito de orar por Venezuela
El Palacio de Eventos con sede en Maracaibo se convertirá este 26 de junio en un escenario de oración por el país con “Impacto de Dios” 2.016, una actividad en la que el pueblo cristiano se levantará con el firme propósito de orar por Venezuela.
“El país está en un momento crucial. Se necesitan cambios y todos los sectores nos tenemos que unir para propiciar estos cambios. El ámbito espiritual no puede estar a un lado. Para que en una nación haya cambios sustanciales en beneficio de la población, hay que partir de lo espiritual, y creo que nuestros políticos, nuestra gente lamentablemente ha puesto esto a un lado. Hay que tomar el ámbito espiritual y provocar cambios desde la raíz”, expuso Paola Santamaría de Porras, presidenta de la Red de Intercesores Latinoamericanos (Redil), quien invitó, no sólo a cristianos, sino a todos aquellos que quieran una mejor Venezuela. La cita es para las dos de la tarde. Participarán alrededor de 70 iglesias regionales y nacionales. El 23 de julio será en Maracay; en septiembre en Temblador, Monagas.
Destacó que ante la crisis, hay un clamor que une a los venezolanos, y es la intervención Divina. Nada mejor que la oración para preparar la atmosfera, de tal manera que Dios pueda actuar. Su mensaje a los venezolanos es mantener la confianza en el Padre Celestial, no perder la esperanza, tener claro que se trata de una crisis pasajera, estar unidos y no ser indiferente a la necesidad del otro. “Es el momento de sacar un espíritu de valentía. No nos podemos sentir víctimas. Hay que entender que Dios está a cargo, y que yo tengo que cumplir con mi propósito para contribuir a los cambios sustanciales que vienen para el país”.