Desde julio, el average de “CarGo” aumentó 38 puntos (de .241 a .279), su porcentaje de embasado también se incrementó de manera notable (de .304 a .338) y su slugging pasó de .411 a .522
Cuando los Rockies de Colorado enviaron a Troy Tulowitzki a los Azulejos de Toronto, la carga en los hombros de Carlos González aumentó. El zuliano se convirtió automáticamente en el referente de la alineación del equipo pese a la presencia de Nolan Arenado y José Reyes.
“Me halaga que piensen que soy la cara del equipo con tanto talento que tengo alrededor. Es una gran responsabilidad porque conozco la confianza que ha puesto la organización en mí”, declaró el jardinero a La Verdad por vía telefónica. “De mi parte está seguir dando el 100 por ciento, es el compromiso que hice desde que llegue aquí y nada ha cambiado en ese sentido. No me sorprende que no me cambiaran porque no estaba contando con eso, lo mío es estar pendiente de mi trabajo. Sabía que podía pasar porque el béisbol es un negocio y uno siempre está propenso a un cambio. Lo importante es no perder el foco”.
Desde el inicio de julio, Carlos se encargó de nuevamente ser uno de los mejores bateadores del juego: su promedio con el madero aumentó 38 puntos (de .241 a .279), su porcentaje de embasado también se incrementó de manera notable (de .304 a .338) y su slugging pasó de .411 a .522, producto de siete dobles y 11 jonrones en el séptimo mes del año.
“Durante los primeros meses de la temporada luché para reencontrar mi swing, haciendo los ajustes luego de volver de una lesión y una operación en la rodilla (izquierda), pero gracias al trabajo y la constancia pude recuperar mi ritmo ofensivo y ponerme bien físicamente una vez más”.
Ausencia de robos
A excepción de las dos últimas campañas, González siempre fue un amenazante candidato a conseguir 30 vuelacercas y 30 bases robadas. En 2010, estuvo a punto de conseguirlo al conectar 34 cuadrangulares y estafar 26 almohadillas. Pero suma apenas cinco estafas entre 2014 y 2015.
“La razón de robar menos bases es que ahora no quiero forzar mi rodilla, que se debilitó después de la operación”, explicó el toletero. “Pasé al menos cinco meses sin ejercitarme, ni correr. Poco a poco he vuelto a darle fuerza, no quiero exigirle a mi cuerpo más de lo que puede dar en este momento. Los robos de base volverán en su momento”.
Época resaltable
41.8 por ciento de los lanzamientos que ve González caen en la zona de strike, números que aprovecha para lograr buenas conexiones. De hecho, solo cuatro jardineros en la Liga Nacional acumulan más de 40 extrabases: Bryce Harper (54), Jay Bruce (43), Andrew McCutchen (42) y el marabino (40), cuyo ISO (estadística que mide la capacidad de dar batazos de dos bases o más) es el segundo más alto entre patrulleros del viejo circuito (.243).
“Ahora me siento bien, estoy muy contento por estar sano en el terreno de juego. Es lo más importante para mí porque mientras más tenga la oportunidad de jugar, los números se van haciendo”, sumó. “La clave está en seguir trabajando duro y jugar todos los días”.
Con 60 desafíos por disputar para Colorado, el zurdo proyecta 29 dobletes, 34 jonrones, 83 carreras impulsadas y 152 imparables, que sería la tercera mayor cantidad en su trayectoria.
Cifras
.316 es el promedio de “CarGo” contra envíos rápidos (recta, sinker y cutter).
.243 es el ISO del zuliano, segunda cifra más alta entre outfielders de la Liga Nacional, por detrás de Bryce Harper (.349).