
Ryan
Por celos de la atención mediática que recibía su hija, de 21 meses, tras sobrevivir al cáncer, Ryan Lawrence, decidió matarla, quemar el cuerpo y arrojarlo a un arroyo en el condado de Onondaga, en Nueva York.
El hombre de 25 años, se declaró culpable de secuestrar a la niña y golpearla en la cabeza con un bate de béisbol hasta producirle la muerte porque “recibía mucho más atención que él, informó RT.
El sujeto fue capturado por las autoridades luego de emitir una orden de búsqueda para Lawrence y la menor. Enfrentará al menos 25 años de encarcelación.
Maddox, como se llamaba la infante, fue diagnosticada con retinoblastoma, una extraña forma de cáncer de ojo pero superó la enfermedad mediante un costoso y duradero tratamiento.