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A Luis Segundo Hernández Nava, de 65 años, lo mataron, ayer a las 9.00 de la mañana, en la calle Mata Palo, del sector Barrancas en el municipio Santa Rita, en la Costa Oriental del Lago. Sus verdugos lo precisaron cuando salía de su casa y sin mediar palabras le dispararon. Se percataron que había fallecido y huyeron a toda velocidad.
Los familiares de Luis aguardaron en el interior de la vivienda hasta que terminara la ráfaga de disparos y cuando salieron a la calle sin presentir que la víctima había sido su pariente, observaron que en la acera yacía el cadáver sobre un charco de sangre. Lo taparon con dos sábanas, una roja y otra blanca, mientras llegaban los detectives del Eje de Homicidios de la Policía Científica, base Cabimas.
Una fuente policial comentó que a Luis le asesinaron el pasado 17 de agosto a un hijo. Era de noche, pero los verdugos pasaron todo el día buscando a José Gregorio Hernández Lozada, hasta localizarlo y dispararle sin piedad. El joven permanecía en la residencia junto a su madre y hermanos cuando los homicidas abrieron fuego a la puerta principal. José al observar a los sicarios trató de huir, pero éstos les dispararon en varias ocasiones por la espalda hasta dejarlo muerto.