
Manuela Bolívar, parlamentaria opositora, dijo ayer que el sistema público de salud se mantiene gracias a la "labor voluntaria" de sus trabajadores, pues sus ingresos son una miseria
La Asamblea Nacional de Venezuela (AN) informó que mediará en el conflicto salarial entre los trabajadores del sector salud y el gobierno de Nicolás Maduro, que mantiene a los enfermeros del país en protesta continua desde la semana pasada.
José Manuel Olivares, presidente de la Comisión de Desarrollo Social de la AN, dijo al término de una reunión con varios gremios sanitarios que el Legislativo asumirá "la protección y mediación" del conflicto, al tiempo que respaldó las demandas de los trabajadores.
"Se exigen soluciones y además se notifica a organismos internacionales para la debida protección y agilización de soluciones al gremio de la salud, que hoy se encuentra protestando", añadió el diputado opositor al Gobierno.
Luego de la reunión, los diputados de la Comisión de Desarrollo Social recorrieron las instalaciones del Hospital Universitario de Caracas (HUC) y constataron las fallas en la dotación de equipos y materiales.
Los gremios de enfermeros y trabajadores del sistema de atención pública de Venezuela protestan desde la pasada semana en demanda de incrementos salariales y de mejores condiciones de trabajo, pues también denuncian el insuficiente equipamiento de los hospitales.
Aunque fueron los enfermeros los primeros en protestar, ahora los trabajadores obreros, administrativos y médicos respaldan las manifestaciones, según detalló EFE.
Una sola voz
Los enfermeros reiteraron que la protesta continúa de manera "indefinida", aunque en días pasados señalaron que las urgencias así como las inmunizaciones son atendidas pese al paro de actividades.
Chaira Moreno, trabajadora del HUC, dijo durante la reunión celebrada hoy que a los enfermeros se les paga "como bachilleres" pese a ser profesionales, y pidió que los sueldos del sector sean "equiparados a la canasta básica", que ronda los 300 millones de bolívares.
"Nosotros en salud damos vida, tenemos que tener los mejores salarios que tenga Venezuela", agregó.
Marzia Schettini, nutricionista del mismo centro, denunció que los pacientes hospitalizados apenas reciben alimentos. "Es inhumano que un paciente en la mañana coma una arepa frita, una arepa asada, un bollito (...), no contamos con vegetales, frutas, proteínas".
Venezuela, el país con las mayores reservas probadas de petróleo en el planeta, padece una severa crisis económica que se traduce en escasez alimentos básicos y medicinas, así como en hiperinflación, un fenómeno que dificulta aún más la obtención de productos de la cada vez menor oferta de ellos.
Los enfermeros del país señalan que sus ingresos mensuales no superan los dos millones de bolívares (poco más de 17 o 0,80 dólares según las tasas oficiales).
Médicos, bioanalistas y obreros denuncian que sus salarios son similares o incluso menores.
Manuela Bolívar, también parlamentaria opositora, dijo ayer que el sistema público de salud se mantiene gracias a la "labor voluntaria" de sus trabajadores, pues sus ingresos son una miseria. "Aunque la lucha sea salarial tiene que haber en el país un cambio en el modelo económico (...) estamos viviendo un colapso".