Migración Panamá informó que al menos 250 migrantes irregulares generaron disturbios la madrugada del sábado en una estación de recepción migratoria en la provincia de Darién, resultando en daños significativos a las instalaciones.
Los incidentes ocurrieron en la Estación Temporal de Recepción Migratoria en San Vicente, Darién, luego de una disputa entre dos mujeres migrantes irregulares por una carpa.
El altercado involucró a las parejas de ambas mujeres, desencadenando una “pelea tumultuaria” entre varios grupos presentes en el lugar.
Las autoridades del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) intervinieron en la situación, pero alrededor de 250 migrantes se enfrentaron a las unidades policiales, lo que requirió un despliegue adicional de agentes para proteger a terceros.
El Servicio Nacional de Migración (SNM) emitió un comunicado señalando que estos actos de violencia causaron graves daños a las instalaciones, incluida la destrucción de vehículos oficiales y civiles, así como el incendio de al menos 10 módulos, el módulo del Senafront y Migración, y el centro de operaciones de la estación.
Hasta el momento, se han identificado 44 migrantes irregulares involucrados en estos incidentes vandálicos, quienes serán investigados y procesados por daños a la propiedad del Estado ante el Ministerio Público (Fiscalía).
La estación temporal de recepción migratoria, que tenía una capacidad para albergar hasta 500 personas, ofrecía servicios básicos para atender humanitariamente a la población migrante, según la información oficial.
El paso por el Darién no se detiene
Las autoridades panameñas informaron la semana pasada que más de 68.400 migrantes han cruzado la selva del Darién en lo que va de 2024, unos 22.673 más respecto al mismo período del año anterior.
El aumento en el número de migrantes que atraviesan el Darién en su camino hacia Estados Unidos o Canadá en busca de mejores condiciones de vida ha sido constante desde 2021, alcanzando una cifra récord de más de 520.000 el año pasado.
Las autoridades prevén un aumento del 20 % en el número de migrantes en tránsito por esta peligrosa ruta durante este año.
El 14 de febrero, al menos cinco migrantes afganos, incluido un menor, perdieron la vida en un naufragio en el Caribe mientras intentaban evitar cruzar el Darién. Los rescatistas encontraron los cuerpos sin vida en una zona rocosa.
El Gobierno de Panamá ha afirmado que la migración a través del Darién es un negocio para el crimen organizado, que el año pasado habría obtenido ganancias por valor de 820 millones de dólares moviendo migrantes por la selva.
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