La “misoginia”, es el odio o aversión hacia las mujeres, se manifiesta de diversas maneras: denigración, discriminación, violencia y cosificación
La mujer venezolana es ejemplo para el mundo de honestidad y honorabilidad en su trayectoria en el campo familiar, religioso, cultural, social, educativo, económico y muy especialmente como actor importante en el ámbito político. Son muy pocos los casos en que la mujer se ve involucrada en casos de corrupción; ella prefiere renunciar antes de caer en actos contrarios a la ética y a sus principios axiológicos dentro de una sociedad.
Con la llegada del comandante eternamente enterrado hay preferencia por mantenerse en el poder a cambio de prebendas y beneficios crematísticos, que devienen de actos impropios, fundamentados en los manejos interesados de los recursos propios del Estado. El CNE es una prueba de ello; cuatro rectoras integran una mayoría sólida; pertenecen al PSUV y están al servicio de sus intereses realizando: trácalas, trampas; siendo con mucho orgullo “tracaleras”. El CNE ante el RR fue vergonzante e indigno; lo ocurrido con las elecciones regionales y municipales, demuestra una vez más que solo les interesa mantenerse en el poder.
El engendro ofende a los venezolanos que ante el irrespeto a la CN de las “cacatúas” manifiestan su rechazo; tilda de misóginos a los mismos. La “misoginia”, es el odio o aversión hacia las mujeres, se manifiesta de diversas maneras: denigración, discriminación, violencia y cosificación. Los hombres, sentimos es “filoginia”, que es todo lo contrario: amor y agrado hacia ellas. Cuando el soberano se expresa en las redes sociales, descarga su ira y su impotencia; manifiesta con su actitud crítica la sanción que merecen quienes actúan como forajidos; se refieren a sanciones éticas y políticas, porque las penales escapan de sus manos.
En ética, la sanción es el castigo impuesto por actos irregulares realizados. No solo puede hablarse de sanciones naturales y de sanciones divinas, sino también de sanciones que, sin ser estrictamente legales, y sin adoptar ninguna forma aparente de castigos o recompensa significa una coacción sobre los actos humanos de diversas índoles, entre ellas la política.
La sanción ética más importante es el rechazo personal; cuestión que es difícil que desaparezca de la conciencia de quien la tiene y si es funcionario público los incrementos crecientes de rechazo se perciben de forma geométrica. Todo esto indica, que la MUD, debe recomponer su Unidad para enfrentar con nuevas estrategias políticas la actitud del CNE, que siguiendo las órdenes de Cuba no realizará elecciones en el 2017 ni nunca más.
diciembre 7, 2024
