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El Mónaco recibirá este domingo al líder de la Liga de Francia, París Saint-Germain, en busca de acercarse al conjunto de Unai Emery en el partido estelar que pondrá fin a la fecha 14 del torneo, que estará marcada por las reivindicaciones de los aficionados como telón de fondo.
Los parisinos, que ofrecieron el miércoles una nueva demostración de su potencial ante el Celtic de Glasgow (7-1) en la Champions League, darán un golpe casi definitivo al campeonato galo en caso de conquistar el estadio Louis II.
A la inversa, los monegascos, a 6 puntos del PSG, buscarán resarcirse de la humillante derrota sufrida en casa el martes ante el Leipzig (4-1) que les dejó sin opciones de clasificación a octavos de la Champions, y tampoco a dieciseisavos de la Europa League.
A la espera de aprovechar un tropiezo de ambos, el Olympique de Lyon se desplaza a Niza. Los lioneses se encuentran a tres puntos del Mónaco y a 9 del PSG.
Pero más allá de los puestos altos, las miradas se dirigirán al Lille ya sin Bielsa, que visitará al Montpellier en su primer partido sin ‘El Loco’, “suspendido” de sus funciones el miércoles.
La visita del Estrasburgo a Saint-Etienne este viernes dará el pistoletazo de salida a la jornada.
Los locales regresan a su estadio Geoffroy-Guichard, escenario de incidentes en el derbi ante el Lyon, saldados con una interrupción de 40 minutos del partido por intento de invasión de campo de los aficionados después de un gol del delantero visitante Nabil Fekir.
Las gradas de los estadios de Francia han vivido numerosos incidentes desde el inicio de la temporada, la última de ellas el domingo en Burdeos, donde un aficionado perdió dos dedos por la explosión de un petardo en el partido ante el Olympique de Marsella.
Los aficionados planean “acciones de protesta” este fin de semana por lo que consideran “una represión desproporcionada” sobre ellos.