Pese a la ilegalidad de la medida, Julio Borges, diputado de Primero Justicia, aseguró que el CNE “pone esto para tratar de tumbar lo que hemos hecho, pero estamos preparados para que no nos hagan perder ni un segundo” con este y con cualquier “otro obstáculo”
Habrá cambios. El reglamento especial que aprobó el pasado jueves el Consejo Nacional Electoral (CNE) y que exige a los partidos postular como mínimo 40 por ciento de aspirantes del género femenino obligará a la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) a hacer algunas modificaciones en sus maquetas, compuestas en su mayoría por hombres.
Ese cambio de nombres lo decidirá, según pudo conocer La Verdad, cada estado por separado. En su mayoría los más afectados serán alguno de los suplentes, que deberán ceder sus puestos a mujeres de sus propias organizaciones.
Como explica el experto electoral Eugenio Martínez en un texto publicado en Prodavinci, desde los partidos de oposición se critica el momento en que se tomó la medida, porque el CNE anuncia la obligatoriedad de cumplir con postulaciones paritarias de género, después de que la alianza realizó primarias en 33 circunscripciones y definió por consenso la mayoría de sus candidaturas. “En el listado de candidatos difundido por la MUD el 24 de junio (un día antes que el CNE tomara la decisión de exigir paridad), de 97 candidatos sólo 11 son mujeres”.
Desde la perspectiva de la oposición, agrega Martínez, el CNE está modificando las normas de los comicios durante el periodo que la Constitución Nacional “prohíbe taxativamente modificar las Leyes Electorales”. Según el Artículo 298 de la Constitución “la ley que regule los procesos electorales no podrá modificarse en forma alguna en el lapso comprendido entre el día de la elección y los seis meses inmediatamente anteriores a la misma”.
Pese a la ilegalidad de la medida, Julio Borges, diputado de Primero Justicia, aseguró que el CNE “pone esto para tratar de tumbar lo que hemos hecho, pero estamos preparados para que no nos hagan perder ni un segundo” con este y con cualquier “otro obstáculo”.
Enrique Márquez, presidente de Un Nuevo Tiempo, coinciden con Borjes en que no se puede perder tiempo. “Nunca estaremos de espaldas a este tipo de decisiones y en función del amplio y fuerte liderazgo femenino que nos acompaña desde UNT y dentro de la unidad democrática. Abriremos paso a cada una de nuestras compañeras, para que participen activamente en nuestra plancha. Ya nos estábamos preparando para eso y ahora con más razón por el anuncio del CNE”.