Los médicos vigilaron y cuidaron al niño de dos años por nueve días. Su estado de salud se complicó y falleció por las quemaduras que sufrió cuando una olla con agua caliente lo bañó
Frente a la morgue forense se encontraba la madre de Alexánder Jesús Báez González, de dos años. Acariciaba la ropa de su bebé, mientras lloraba. En unos segundos lo vestiría por última vez, en esta oportunidad para su funeral.
Con tristeza, el ama de casa contó cocinaba en su residencia, en la parroquia Ricaurte del municipio Mara. En unos instantes lo perdió de vista y su pequeño agarró una olla con agua caliente y se bañó. Se quemó 80 por ciento de su cuerpo.
El accidente ocurrió, el pasado 30 de mayo, en la casa 9. La madre al escuchar los gritos del pequeño lo socorrió y lo llevó al centro asistencial de la zona, donde le brindaron los primeros auxilios, luego lo remitieron a la Unidad de Quemados del Hospital Coromoto, en Maracaibo, informó la Policía.
Los médicos vigilaron y cuidaron al niño por nueve días. Su estado de salud se complicó y falleció, el pasado jueves a las 2.30 de la tarde. Las quemaduras de tercer grado colapsaron su sistema y no pudieron reanimarlo.
La familia se limitó a concluir los trámites necesarios para el sepelio y prefirieron no dar declaraciones a los medios. El ama de casa estaba en shock.