Docentes, personal obrero y administrativo, exdirectores, egresados y alumnos ofrecieron una eucaristía de acción de gracias. El instituto arquidiocesano celebró ayer un año más de excelencia educativa
Eran cerca de las 8.00 de la mañana del martes 18 de noviembre de 1975, cuando monseñor Domingo Roa Pérez, arzobispo de Maracaibo, junto al presbítero Gustavo Ocando Yamarte firmaron el documento que oficializaba la creación del Instituto Niños Cantores del Zulia. Luego de aquel pequeño acto realizado en la intimidad de una oficina en el Palacio Arzobispal, partieron a la Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá, a ofrecer ese sueño que apenas iniciaba a la Patrona del Zulia en su día. La Chinita bendijo el proyecto y ya son 40 años de un largo y fructífero trajinar.
La institución en pleno celebró ayer cuatro décadas de formación de “hombres nuevos”. Docentes, personal obrero y administrativo, exdirectores, egresados y alumnos ofrecieron una eucaristía de acción de gracias en la iglesia del Padre Claret. Allí las voces del coro se hicieron sentir. Siguen más activas que nunca, enalteciendo y alabando las bondades del creador.
Monseñor Ubaldo Santana, arzobispo de Maracaibo, presidió la eucaristía. En su homilía habló sobre la importancia de esta institución dentro del proyecto educativo arquidiocesano impulsado por monseñor Roa Pérez y capitalizado en el ímpetu y voluntad del padre Ocando Yamarte.
El máximo representante de la Iglesia Católica en la región comentó que Niños Cantores fusiona lo académico con lo musical. “El salmo 88 dice 'Cantaré eternamente las misericordias del señor’, y Niños Cantores del Zulia tiene 40 años elevando su voz al altísimo”.
Celebración familiar
En las bancas del templo se observaban niños desde preescolar hasta quinto año, vestidos con su tradicional camisa de cuadros. Los acompañaban sus padres y familiares.
Durante las diferentes etapas de la liturgia participaron miembros activos y fundadores de la institución. La familia Niños Cantores se abocó por completo a celebrar por lo alto un aniversario más de existencia.
Antes de culminar, el padre Eduardo Ortigoza, director general del INCZ, agradeció a quienes desde hace 10 años luchan por el fortalecimiento de este proyecto. “La misión educativa se mantiene intacta. Estoy convencido de que con el apoyo del personal que me acompaña lo vamos a seguir proyectando por siempre”.
El arzobispo de Maracaibo culminó la eucaristía. El Aleluya de Haendel retumbó en el templo. El coro de NC, junto a la orquesta de cámara, cantó una vez más las misericordias del Señor. Los aplausos y hasta las lágrimas en algunos de los presentes no se hicieron esperar. El sueño iniciado cuatro décadas atrás continúa bajo la bendición de La Chinita. La formación de “hombres nuevos” con oportunidades superiores está más viva que nunca.
Base filosófica
La principal misión y base filosófica del INCZ es la formación de niños y jóvenes preparados para ser protagonistas de una mejor sociedad, conformada por personas con bases sólidas y una formación integral para un futuro mejor: los llamados “hombres nuevos”.
El logo
El logo del instituto tiene el color del sol anaranjado como el atardecer que cae sobre Maracaibo, con el pájaro en el centro que representa el canto armonioso y todas las bases filosóficas de la institución.
El padre fundador
Monseñor Gustavo Ocando Yamarte nació el 22 de marzo de 1939 en el estado Falcón, es sacerdote, periodista e historiador. Es conocido por haber fundado el Instituto Niños Cantores del Zulia, el canal Niños Cantores Televisión, la Universidad Católica Cecilio Acosta, la iglesia San Tarsicio, el Museo Ciudad de Dios, el Museo Arquidiocesano, el Templo Bautismal Rafael Urdaneta y el Hospital Madre Rafols.
