Diez infantes murieron entre junio y julio de este año en su mayoría a causa de recaídas en sus tratamientos. Desde el jardín de la Fundación Hospital de Especialidades Pediátricas familiares, pacientes y médicos liberaron globos con mensajes de lucha en medio de la crisis
Esperanza en medio de la crisis. Así lo manifestaron los 150 asistentes a la actividad de Notas al cielo organizada por el grupo de psicólogos de la unidad de Oncología de la Fundación Hospital de Especialidades Pediátricas (FHEP).
Aiskel Rosales, psicóloga y sobreviviente de leucemia, explicó que desde hace cuatro años ofrecen la ceremonia para crear un espacio donde las personas que perdieron un ser querido ante el cáncer tengan un momento especial para recordar las enseñanzas que les dejaron. Y para que los pacientes que aún están en tratamiento, eleven un mensaje a Dios. La idea original fue de la fundación Jóvenes Contra el Cáncer, de Ecuador, y se realiza simultáneamente en diversos países de América.
Notas al cielo
Diez pacientes fallecieron en su mayoría a causa de recaídas en sus tratamientos entre junio y julio de este año. Las lágrimas y palabras de aliento volaron entre los familiares de pacientes que murieron y los actualmente en tratamiento que acudieron a la cita.
Con papeles y marcadores en mano, los pequeños colocaron sus mensajes en los globos blancos, que representan a los niños que partieron y los amarillos a la esperanza hacia los que están en la lucha contra los diversos tipos de cáncer. Al final del conteo entre palmadas de apoyo y un canto de esperanza, los focos bicolores bailaron hacia las nubes. Cada año este acto representativo llena de emociones a las familias y para los niños fue un momento para recordar.
Apoyo
Luz González, miembro de la Fundación Compañeros de Batalla, extendió su agradecimiento a las personas que con un granito de arena hicieron posible el acto que representa un momento íntimo entre las familias y amigos de los pacientes que partieron.
Para la fundación en este momento luchar contra la crisis es una prioridad. La activista aseguró que buscan otros aliados para conseguir aportes porque “hoy más que nunca” el cáncer es un camino duro por la falta de medicamentos. “Cada día los niños necesitan más cosas y más ayuda. Por esto las fundaciones se están haciendo insuficientes, no podemos abarcar tanto”.
Con 10 años de labor en el centro de salud, piden a las personas que se “sumen a dar”, no solo monetaria sino con colaboración en eventos y aportando.
Daliana Amaya, marabina sobreviviente de cáncer. “Sufrí mucho emocionalmente, pero nunca pensé en el final de mi vida. Esto nos dejó muchas enseñanzas y me dio fortaleza. La vida es muy linda para rendirse”.
Ríchard Godoy, párroco de la iglesia San Ramón Nonato. “El hecho de tener una enfermedad no implica que no se puede ganar contra ella. Debemos tratar el cáncer sin miedo, sin tabú y afianzando la fe en Dios”.
diciembre 7, 2024
