Niños de República Dominicana nacen con una anormal condición genética común en la región, la cual provoca que sus órganos sexuales, como pene, testículos y genitales, se desarrollen a los doce años de edad.
Existen niños en República Dominicana que se les desarrolla el pene y los genitales a los doce años de edad debido a un problema genético por la carencia de la de la enzima 5-alfa reductasa que convierte a la testosterona en dihidrotestosterona, esta hormona reside en la próstata, testículos y folículos pilosos del cabello. Se les llama los güevedoces, coloquialmente, a los niños con esta condición hormonal, la expresión significa “con penes a los 12 años”.
La mamá de Carla descubrió que su hija en realidad es niño, pues a sus siete años de edad la llamarán, ahora, Carlos, porque su cuerpo se empezó a formar como el de un niño. Su madre empezó a percibir el cambio desde hace tiempo. “Cuando cumplió cinco años, me di cuenta de que siempre que veía a uno de sus amigos niños, quería pelear con ellos. Sus músculos y su pecho empezaron a crecer. Podías ver que iba a ser un niño. Yo la quiero sea quien sea. Niña o niño, me da igual”.
Esto es común en República Dominicana, donde Johny, quien vive en Barahona, antes se llamaba Felicita. Ya que, sus padres lo criaron como niña, porque no sabían cuál era su género al haberse formado aun sus órganos sexuales hasta que llegó a la pubertad y se le desarrollaron el pene y los genitales, reseñó la BBC mundo.
El niño recuerda haber asistido a la escuela con un vestido rojo, no obstante no le gustaba practicar actividades femeninas y fue víctima de acoso escolar cuando su cuerpo se trasformó en el de un hombre razón por la cual peleaba con sus compañeros. “Nunca me gustó vestirme como una niña y cuando me traían juguetes para niñas nunca los utilizaba. Cuando veía a un grupo de niños, me paraba para jugar a la pelota con ellos”.
El adolescente dominicano cuenta como le decían que era el diablo, lo insultaban con ofensas en la escuela. Por ello, “no tenía opción que pelear con ellos, porque estaban cruzando una línea”. El caso de Johny fue documentado, cuando la BBC grababa una serie llamada “Countdown to Life” (Cuenta atrás para la vida en español). La serie presentó cómo se desarrolla el útero y cómo esas transformaciones inciden en etapas de la vida.
La investigadora Julianne Imperato-McGinley de la Universidad de Medicina de Cornnell en Nueva York ha realizado diversos estudios sobre los güevedoces basados en biopsias de sus testículos para descubrir el fenómeno. En 1970, llegó a República Dominicana a causa de los rumores respecto a las niñas que se convertían en niños.
Muchos de los niños tienen el cromosoma XY, no obstante su apariencia física parece de niña. Después, en la pubertad reciben más testosterona y les nacen los músculos, testículos y pene. Según Imperato-McGinley los nuevos órganos masculinos de los niños funcionan eficientemente. La mayoría vive como hombres otros se operan para volver a ser niñas.
Las investigaciones revelaron que las próstatas de los güevedoces suelen ser más pequeñas de acuerdo a los estudios de 1974 recogidos por el director de investigación de la industria farmacéutica Merck, Roy Vagelos.
Los güevedoces a pesar de recibir educación para niñas, cuando no lo son, prefieren ser heterosexuales. Como Johny, quién ha tenido novias y quiere casarse para tener hijos. “Me gustaría casarme y tener hijos, una pareja que esté conmigo en lo bueno y en lo malo”, confesó.