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Más de nueve meses llevan los vecinos del sector cuatro de San Jacinto padeciendo por un bote de aguas negras producto de un matapalo que rompió las tuberías internas. Niños con erupciones en la piel, gusanos por doquier, dolores de garganta en adultos y un mal olor casi insoportable, son algunas de las consecuencias de este grave problema que mantienen en alerta a la comunidad.
Fernando Wuertter, vecino del sector, informó que cuando el agua llega es peor porque la calle se convierte en un río de aguas negras. “Hay vecinos que ya han clausurado sus baños, porque esa agua sucia se les devuelve”.
Los vecinos denunciaron que han acudido varias veces a Hidrolago a exponer la situación y nos les dan respuesta. “Nos dicen que están dañados los camiones para romper la carretera y por eso no pueden hacer nada, solo vienen a achicar el agua de la tanquilla y ya nosotros no aguantamos más”.
La comunidad de San Jacinto exige a las autoridades abocarse a la solución de este problema, pues temen por sus vidas al estar expuestos constantemente a este foco infeccioso.