
Brack
Brack Alexánder León Rodríguez, de un mes de nacido, falleció ayer al mediodía en una camilla del Hospital Universitario de Maracaibo. Los familiares esperaban a las afueras del quirófano del área de Pediatría, mientras unos médicos le practicaban una traqueotomía al pequeño. Una hora duró la intervención. A la puerta se acercó una cirujana y comentó: “Nos pasamos de anestesia, el bebé morirá en cualquier momento”, denunció Yameri Parra, abuela del pequeño.
Los parientes al escuchar comenzaron a gritar en el cuarto piso del nosocomio. Julio León, padre del niño, desesperado preguntaba a los doctores qué ocurría. Obtuvo la misma respuesta: “Mijo, yo no sé nada”.
El cuerpo de Brack permanecía en la camilla donde lo habían intervenido, nadie le daba respuesta a sus padres, quienes denunciaban a los médicos por mala praxis. “Los médicos están escondidos, pero vamos a saber quiénes son”.
El bebé nació con dificultad para respirar y el pediatra neonatal dio la orden de que lo intubaran. El viernes 12 de agosto, decidieron retirarle las sondas y observar su estado. “Durante ese fin de semana, mi nieto convulsionó varias veces y no lo atendieron hasta el lunes”.
La familia pide a las autoridades que se pronuncien y tomen las medidas correspondientes para sancionar a los médicos.
Los parientes de otros pacientes denunciaron que el área de hospitalización no está en condiciones para mantener a los pequeños. “Las chiripas le pasan por encima a los bebés”. Además explicaron que la lista de medicamentos e implementos médicos que le piden es exorbitante. “Nosotros vemos pasar las cajas de guantes, sondas, medicamentos y de igual manera nos piden más”.