Notículas de Español

El gerundio no puede indicar consecuencia con respecto al verbo principal. La correcta redacción de este pensamiento es: habiendo leído la trágica noticia (causa), se sumió en un profundo mutismo

Continuamos revisando el correcto uso del gerundio, con ejemplos sencillos para clara comprensión por parte de los hablantes comunes y de los redactores no profesionales, para quienes estas notas van dirigidas. En una oración compuesta por subordinación con presencia gerundial donde se presente una acción que determine una consecuencia, esta no debe estar señalada por el gerundio. 

No es correcto decir: Sufrió un accidente, quedando lisiado. Como hemos visto, quedando lisiado es una acción posterior a sufrir el accidente, lo cual hemos suficientemente aclarado que es incorrecto. Se suma a ello que es la consecuencia de sufrió un accidente, lo cual es también incorrecto. Y esto es lo que nos interesa fijar: el gerundio no debe indicar consecuencia con respecto al verbo de la oración principal. Él debe señalar la causa: Habiendo sufrido un accidente (causa), quedó lisiado (consecuencia). Por supuesto, este mensaje puede también formularse como una coordinación copulativa: sufrió un accidente y quedó lisiado.

Veamos otro ejemplo. Es incorrecto decir: Leyó la trágica noticia (causa), sumiéndose en un profundo mutismo (consecuencia). El gerundio no puede indicar consecuencia con respecto al verbo principal. La correcta redacción de este pensamiento es: habiendo leído la trágica noticia (causa), se sumió en un profundo mutismo. Y, desde luego, puede dársele la redacción de una coordinada copulativa: leyó la trágica noticia (causa) y se sumió en un profundo mutismo (consecuencia).

Igualmente sucede con los planteamientos condicionales y concesivos, matices, desde luego de causalidad. En los períodos condicionales, se distinguen dos oraciones o proposiciones: la principal que expresa la consecuencia, el efecto (apódosis) y la subordinada que contiene la condición (prótesis). Esta va, generalmente, encabezada por el adverbio si: si tú me dices ven (prótesis), lo dejo todo (apódosis). Y es la que, correctamente, puede redactarse en gerundio: diciéndome tú ven, lo dejaría todo.

Las concesivas pueden indicar hechos reales, tangibles, o irreales, supuestos. La oración principal se construye con verbos en presente o futuro, y con pospretérito y formas subjetivas las segundas. Ejemplo: siendo (aunque soy) su amigo, no lo apoyo. Es corriente que el gerundio concesivo vaya antecedido de aun: aun no teniendo dinero, te ayudaré; aun no sabiendo la dirección, te llevaré. 

Visited 5 times, 1 visit(s) today