El refugio consta de tres enormes carpas, cada una destinada a diferentes tipos de familias, la primera para madres solteras con hijos pequeños, la segunda para familias completas y la tercera para padres solteros con hijos adolescentes o mayores
Recién abierto el nuevo albergue federal para migrantes en Ciudad Juárez, Chihuahua, cuatro familias venezolanas pidieron refugio para tener un lugar donde dormir y comer, mientras solicitan asilo para trabajar y vivir en los Estados Unidos.
El Instituto Nacional de Migración (INM) dio a conocer que este miércoles ha canalizado a 22 personas que conforman cuatro familias provenientes de Venezuela hacia el campamento provisional para migrantes.
Las primeras familias comenzaron a llegar al campamento después de las 6.00 de la tarde de ayer. Todas ellas son originarias de Venezuela y ahora se encuentran protegidos en México, facilitar, “un proceso migratorio ordenado, seguro y digno”, afirmó el titular de la oficina de derechos humanos del municipio de Ciudad Juárez, Santiago González.
El funcionario explicó que una empresa privada está a cargo del suministro de alimentos, asegurando así que las familias reciban apoyo alimenticio, además, de que “se les brindará asesoría sobre el uso de la aplicación CBP One, con el objetivo de agendar citas para solicitar asilo en los Estados Unidos”.
Este campamento provisional está ubicado entre las calles David Herrera Jordán y Moctezuma, por la zona del Pronaf, desde donde se ve el muro que divide a México con Estados Unidos.
El albergue tiene una capacidad para albergar a 300 personas y será administrado por la Dirección de Derechos Humanos del municipio, en apoyo a las familias en situación de movilidad.
El refugio consta de tres enormes carpas, cada una destinada a diferentes tipos de familias, la primera para madres solteras con hijos pequeños, la segunda para familias completas y la tercera para padres solteros con hijos adolescentes o mayores.
Además, las familias alojadas en este espacio tienen total libertad para entrar y salir, pero se ha implementado un sistema de identificación mediante pulseras para garantizar que solo las personas autorizadas accedan al lugar.
Se estima que las familias podrán permanecer en este campamento hasta una semana y media, dependiendo del avance de su proceso migratorio. Posteriormente, se les animará a trasladarse a cualquiera de los albergues de la ciudad, que ofrecen una gama más amplia de servicios y programas de apoyo, informó Excélsior.
El defensor de derechos humanos dijo que este esfuerzo conjunto entre el INM y el Gobierno municipal busca proporcionar un entorno seguro y digno para las familias en situación de movilidad, mientras se avanza en la gestión de sus trámites migratorios.
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diciembre 7, 2024
