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Barack Obama, presidente de Estados Unidos, quien en junio pasado escribió su célebre hashtag #LoveWins (el amor gana) –celebrando la legalidad en todos los Estados de su país, del matrimonio para personas del mismo sexo-, fue nombrado por Out Magazine “Ally Of The Year”, (aliado” del año), por su apoyo a la causa en el avance de los derechos LGBT.
Y no solo eso, al recibir tal reconcomiendo, aparece en la portada de la publicación, convirtiéndose de paso en el primer Mandatario de una nación en posar para un una revista gay, y de paso, dar toda una entrevista del tema homosexual en un país que pese a estar más avanzado que otros en igualdad, siguen apareciendo casos como los de Kim Davis, la empleada encargada de dar certificados de matrimonio en Kentucky, y que se negó en varias ocasiones a entregarlo a parejas homosexuales por ser “una decisión de cielo o infierno”.
“Soy un hombre de fe y creo profundamente en la libertad religiosa. Pero al final del día, nadie está por encima del Estado de Derecho, mucho menos alguien que juró defenderlo”, dijo el Mandatario.
Reflexionando acerca de los derechos humanos universales más básicos, como la libertad de expresión y asociación pacifica, la no discriminación y la igualdad ante la ley, Obama recalcó que el pertenecer a una comunidad LGBT no le quita a nadie esos privilegios inherentes al ser humano.
“Así que mientras algunas personas reclaman que la homosexualidad no existe en su cultura o que estamos tratando de imponerles valores “de afuera”, la verdad es que las personas LGBT son miembros de todas las sociedades y la protección de los derechos humanos es un valor universal”, agregó.
“¿Ver a Sasha y Malia crecer, lo hizo ser más consciente de la diferencia de actitud frente a la homosexualidad que ellas tenían, en comparación a la que había en generaciones anteriores?”, le preguntaron.
“Absolutamente”, respondió. “Para ellas y sus amigos, la discriminación hacia alguien, en cualquiera de sus formas, no tiene sentido. Es incomprensible para ellas que sus amigos gay o los papás gay de sus amigos sean tratados de manera distinta”.
“Es muy importante acabar con prácticas tan nocivas como las terapias de conversión para jóvenes, y permitirles al fin ser quienes son. La nueva generación está impulsando el cambio y no solo para las generaciones futuras, sino que para la mía también. Como Presidente y papá, eso me hace sentir orgullo. Me da esperanza”, declaró Obama.