El gobierno de Colombia expresó este domingo 30 de noviembre “su preocupación” por la reciente NOTAM que emitió Estados Unidos por las “condiciones de riesgo” para la “aviación civil internacional” en la Región de Información de Vuelo (FIR, en inglés) Maiquetía.
La Cancillería resaltó que “una NOTAM emitida por un tercero, sin la debida coordinación con Venezuela” solo “introduce un elemento de incertidumbre operacional”.
En el criterio del Ministerio de Relaciones Exteriores cafetero, la NOTAM puede generar “compromisos en la claridad, en la confiabilidad y unidad de la información necesaria para la seguridad de la aviación civil internacional”.
Agregó que América Latina y el Caribe “son zonas de paz” en las que “las medidas unilaterales de naturaleza militar o con impacto sobre la seguridad aérea generan tensiones innecesarias y afectan la estabilidad regional”.
“Actuaciones no coordinadas sobre el espacio aéreo de un Estado soberano resultan contrarias al espíritu de cooperación, buena fe y respeto mutuo que deben guiar las relaciones entre los Estados de la región y con actores externos”, añadió en un comunicado de prensa.
Especificó que promoverá “el pleno respeto de las normas internacionales en tema de navegación aérea” así como “los principios de soberanía, no injerencia y solución pacífica de controversias” que “sustentan la seguridad y estabilidad de América Latina y el Caribe”.
Reacción del Ministerio de Transporte
Por su parte, el Ministerio de Transporte, a través de la Unidad de Aeronáutica Civil, informó que el “espacio aéreo de Venezuela” está “plenamente abierto y operativo, sin restricciones que afecten la navegación aérea civil”.
Puntualizó que “hay tranquilidad en sus cielos, en los que no hay situaciones que afecten la seguridad operacional en este momento”.
“Un tercer Estado no posee injerencia ni competencia soberana sobre el espacio aéreo venezolano, haciendo afirmaciones que no han sido coordinadas con la autoridad aeronáutica de este país”, agregó.
Resaltó que ese tipo de declaraciones “carecen de validez operativa y generan confusión en el sistema de aviación civil”.
“La emisión de advertencias por parte de terceros sin esta coordinación introduce incertidumbre operacional, compromete la confiabilidad de la información aeronáutica y generar afectaciones a los usuarios que vulneran sus derechos y alteran la estabilidad regional del transporte aéreo”, señaló.
Subrayó que la “solución a la situación interna de Venezuela, incluyendo la consolidación de su democracia, debe ser producto exclusivo de sus fuerzas internas y de la voluntad de su pueblo”.
La Aeronáutica Civil manifestó que está “monitoreando esta situación y reafirma la importancia del respeto absoluto a las normas internacionales que regulan la navegación aérea, fundamento esencial para un sistema seguro, confiable y coordinado en beneficio de todos los pasajeros”.
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