Apuntalados en varios puntos de la zona 1 capitalina, donde está ubicado el Organismo Legislativo, grupos de la sociedad civil pidieron a golpe de bombo y platillo un cambio en la política, pues están en desacuerdo con la actuación de Morales, que ayer cumplió un año de mandato
Decenas de personas se unieron ayer en las inmediaciones del Congreso de Guatemala para protestar contra el presidente Jimmy Morales, cuando él se encontraba en una sesión solemne para presentar su primer informe de Gobierno al pleno.
Apuntalados en varios puntos de la zona 1 capitalina, donde está ubicado el Organismo Legislativo, grupos de la sociedad civil pidieron a golpe de bombo y platillo un cambio en la política, pues están en desacuerdo con la actuación de Morales, que ayer cumplió un año de mandato.
Entre las peticiones de los manifestantes está el desvío de ríos, la financiación irregular, la falta de transparencia o la desnutrición, una lacra que afecta a casi la mitad de los niños menores de cinco años del país.
Precisamente por este motivo colocaron varios cuadros de pequeños desnutridos afuera del Congreso, con las “calaveras de la mortandad” y “la desolación” que sufren por falta de atención.
Otra de las principales demandas de la población es el fin de la corrupción, un flagelo que sobrevoló el primer año de Morales, un derechista de 47 años que asumió el poder el 14 de enero con un discurso acérrimo contra la corrupción, la pobreza, la violencia y la falta de educación.
Opositores se van
La bancada opositora de Guatemala Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) abandonó el Congreso cuando el presidente Morales rendía su primer informe de Gobierno.
El diputado del bloque Mario Taracena, quien este sábado entregó la presidencia del Organismo Legislativo al diputado Óscar Chinchilla, del opositor partido Compromiso, Renovación y Orden (Creo), dijo que la salida de todos los parlamentarios de su bloque fue para protestar por la actitud de Morales.
El presidente, quien llegó caminando al Congreso desde la Casa Presidencial, entró a la plenaria con más de una hora de retraso, un hecho que incomodó a algunos diputados, que esperaban por su persona para dar inicio a la sesión, en la que se produjo también el cambio de la junta directiva para el periodo 2017-2018.