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El enemigo que tiene problemas internos está maduro para ser conquistado. SunZi
He estado en diferentes conversaciones con diferentes grupos sociales y el tema focal ha sido el ir o no ir a las elecciones, votar o no, decirle traidores a todos los de la MUD, o acompañarlos en esta nueva etapa. Se dice que el venezolano tiene memoria corta y quiere todo ¡ya!. Que la instalación de la ANC nos bajó el ánimo y cercenó nuestras ganas de seguir luchando por libertades reales, reglas claras y un brillante panorama sobre la visión de un país, que tiene todo el potencial para ser una república de primera.
Nosotros como venezolanos estamos esperando que pase algo, que sea la economía, que sea Trump, que sea la Fuerza Armada, o un milagro que nos cambie el país. Estimado lector con mucha pena le digo que así no es, según Datanálisis un 78 % de la población quiere cambio, pero solo un 5 % está dispuesto a salir a la calle por mejoras, una protesta no tumba gobiernos, pero muchas propuestas alineadas sí lo hacen.
Basado en todo este escenario hace días tuve la oportunidad de ir a una cena con el politólogo John Magdaleno, y una de las cosas que llamó mi atención era que un buen empresario en este momento debe jugar en varios tableros, basado en la metáfora del ajedrez, pero que también como sociedad debemos empezar a jugar alineadamente en 10 tableros una y otra vez, quizás sea verdad el lema “El que se cansa pierde”, los primeros tableros son:
– Seguir mostrando lo que se hace, las movilizaciones, la represión, utilizar las redes sociales de manera efectiva, hacer un bloque robusto donde la opinión pública nacional esté informada de lo que pasa, para que a su vez tenga alcance en cadenas internacionales.
– Como ciudadanos debemos articularnos; es momento de que salga el líder que llevamos dentro para hablar en nuestra comunidad sobre lo que pasa, daños al país, el deterioro de la economía y que se defina lo que realmente es la guerra económica.
– Si somos venezolanos y a todos nos toca y nos incumben los mismos problemas, como ciudadanos de primera debemos ser inteligentes para invitar al chavista descontento, a que se una al sueño de un mejor país, ofreciéndole un proceso de negociación y comunicándoles que de cambiar el país, existirá espacio para aquel que piensa diferente.
En el próximo artículo contaré, los otros siete tableros donde debemos jugar como venezolanos; estoy seguro que todos queremos un país próspero, seguro y pujante.