Venezuela consolidó en su estrategia defensiva las bases del título conseguido en el torneo Fiba Américas 2015. El quinteto dejó a sus rivales en 70.3 puntos por juego, el promedio más bajo del torneo
“En el baloncesto las cosas se resumen a hacer un punto más que el rival, para nosotros es todo lo contrario, ellos deben hacer un punto menos”. Esta es la idea que Néstor “Che” García le inculcó a la selección venezolana de baloncesto. Una estrategia que fue empleada al pie de la letra por sus dirigidos y que resultó siendo la clave para el primer título de la Vinotinto a nivel continental.
García, entrenador del quinteto nacional, ya tiene ganado un lugar de privilegio en la historia del deporte nacional. Su convicción del éxito a través del orden defensivo fue transmitida y asimilada por cada uno de sus dirigidos. “Hay que darle todo el crédito a estos jugadores, ellos dieron todo. Había inspiración, había compromiso, había alma, no era solo una pelota de basquetbol”.
Venezuela se presentó en México como un equipo de talla menor, que no tenía margen de error, pero superó todas sus limitaciones. Basó su éxito en la unión de grupo, la disciplina táctica y respeto a la figura del entrenador.
“El mensaje era que 40 minutos no eran nada, cuando llevamos tres años cambiando la mentalidad y la manera de jugar. Estos muchachos mostraron mucha fortaleza mental para afrontar las críticas y cambiar un estilo de juego que no es ni mejor ni peor que otros, simplemente que es la manera de cómo se juega en esta selección”, comentó García.
“Somos los campeones de América. Es una hazaña que se logró con un grupo blindado por completo a una idea y que siempre creyeron en ellos. El equipo ha jugado para estar a la altura, defendimos como se tiene que defender a este nivel y ahora es momento de celebrar”.
Venezuela es la única selección sudamericana en ser campeona consecutiva de un Campeonato Sudamericano (2014) y de Torneo Fiba Américas (Preolímpico, 2015).
