Regresar a clases sin estrés

 No tiene que ser una tarea agobiante. La Verdad muestra una guía de ayuda para sobrellevar los obstáculos más comunes. Es necesario que los padres estén muy pendientes en la preparación de la lonchera escolar para que su niño mantenga una alimentación sana y saludable

Suena de nuevo el timbre, y para muchos es significado de alegría, para otros no tanto. El regreso a clases acelera el ritmo de todos a todo nivel. El miedo y la ansiedad por la llegada del comienzo de clases, y la tristeza de que las vacaciones llegan a su fin, son emociones que causan estrés en toda la familia. Y mientras se hacen todos los preparativos para el regreso a clases, los padres pueden sentirse bajo la presión y el estrés que llega como consecuencia de lidiar con las necesidades de los niños, así como el cambio de rutina y horario, el trabajo diario y las tareas escolares.

¿La tarea difícil? Para las madres resulta “un verdadero caos” porque deben regresar a la rutina escolar matutina. Y es que no es para menos, entre preparar el desayuno, hacer la lonchera, guardar los útiles escolares, y llegar a tiempo a la parada del autobús, el tiempo vuela y la jornada se convierte en una agotadora maratón.

Lonchera saludable

Es importante que los niños, mientras que están en la etapa escolar y de crecimiento, mantengan una alimentación sana y saludable, y es por eso que los padres deben estar muy pendientes en la preparación de la lonchera escolar. Los niños, cuando están en la edad preescolar, se produce un descenso de las necesidades energéticas y al mismo tiempo el crecimiento también se desacelera. Un objetivo prioritario es enseñar a los niños desde pequeños a tener un estilo de vida saludable, tanto en el presente como en el futuro.

La lonchera escolar debe proporcionar al niño toda la energía y nutrientes fundamentales para su organismo; es importante recordar que no puede reemplazar la comida principal, como lo es el desayuno o el almuerzo. La lonchera es una pequeña merienda que no debería sobrepasar las 250 o 300 calorías, y la clave para lograrlo, es que ofrezca a los niños alimentos de alto valor nutritivo pero que también sean atractivos para los más pequeños de la casa.

¿Qué debe tener la lonchera?

Utiliza alimentos de los diferentes grupos: energéticos, reguladores y formadores.

• Energéticos: galletas integrales o algún otro cereal como las barritas o el pan.

• Reguladores: frutas, preferiblemente la fruta natural, entera o en pedazo, o verduras picadas, cocidas o crudas.

• Formadores: lo ideal para la lonchera son los semidescremados como la leche, yogurt, quesos, huevos, etc.

¿Qué puedo incluir en la lonchera?

Alimentos que proporcionen energía, como por ejemplo: pan integral, cereal integral, frutas y  jugos.

• Alimentos de origen animal que sean bajos en grasas como las tortillas, revoltillos, jamón de pollo o de pavo, salchichas, que son fáciles de combinar para la lonchera escolar.

• Alimentos lácteos que generalmente son los preferidos por los niños en las loncheras, como por ejemplo: leche, queso y yogurt.

• Alimentos con alto contenido de fibra, vitaminas y minerales, como frutas, verduras y cereales integrales.

Consejos para regreso sin estrés

Descanso. Volver a la rutina mañanera no es fácil, sobre todo cuando en las vacaciones los horarios para dormir cambian. Semanas antes de comenzar clases, es recomendable dormir a los niños más temprano para cuando llegue el primer día, se despierten con full energías.

Compras previas. Ir con los pequeños a comprar sus útiles escolares para su nuevo año, es una manera de motivación para ellos. Se aconseja darles la libertad para que escojan dos cosas que no están incluidas en la lista de útiles.

Meriendas. Esto es clave para evitar una mañana con estrés. Hay quienes optan por hacer figuritas con sus comidas, lo que a los niños les encanta. 

Ropa lista. Otro truquito es dejar la ropa lista la noche anterior. 

No olvidar decir “Te Quiero”.  Recuérdales a tus hijos cuánto los quieres. Tómate el tiempo de darles un beso y un abrazo antes de dejarlos en la escuela o llevarlos a la parada del autobús. Dales ánimo y regálales tu mejor sonrisa.