Desde hace dos meses la vía se inundó y los residentes informaron que están cansados de llamar a Hidrolago para que solventen el problema.

Un bote de aguas servidas tapizó la avenida 23 del sector Paraíso, dificultando el paso vehicular y de los transeúntes. Una capa de limo recubre las aceras del edificio Xenium y de Armonion I y II. Desde hace dos meses la vía se inundó y los residentes informaron que están cansados de llamar a Hidrolago para que solventen el problema.

“Hace tres semanas vinieron los trabajadores de Hidrolago en un camión Vacum, inspeccionaron y dijeron que es el colector lo que está es roto, mandaron a comprar cemento y tres metros de tubo”, expresó Jaime Barroso, encargado de seguridad de la residencia Xenium. Agregó que los empleados de la estatal hidrológica del Lago le informaron que en cuanto tengan los materiales repararán la avería.

Las aguas negras brotaron y esta semana ingresaron al lobby de la residencia Armonion II. Deivi de la Oz, vigilante de la edificación, informó que muchas familias son afectadas por este bote y temen contraer cualquier enfermedad por la contaminación que acarrea. Aseguró que en el edificio Armonion I se comenzaron a desbordar las aguas servidas. “Los marañeros de Hidrolago no arreglan nada, si no les pagamos”.

El sereno del conjunto residencial contó que hace dos semanas, una de las habitantes del Xenium se movilizó hacia la hidrológica y preguntó por qué no habían resuelto el problema y la respuesta que recibió fue: “No hay material”. De la Oz agregó que los residentes están molestos porque “para quitar el agua sí están atentos, pero no para solucionar las fallas”.