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La ofensiva de Sandy León estuvo desaparecida durante gran parte de su carrera. Su debut en las Grandes Ligas, en 2012, lo consiguió por su fama a la hora de manejar el pitcheo detrás del home, pero la estabilidad podría hallarla por el excelente despliegue ofensivo que vive con los Medias Rojas de Boston en 2016.
León batea para .452 en 21 juegos, con dos cuadrangulares, nueve dobletes, 13 remolcadas y 11 anotadas. Esos números lo tienen como uno de los receptores principales del club, por encima de Ryan Hanigan en la lucha por la titularidad de la posición.
“Gracias a Dios por la salud y por todo lo bueno que está pasando”, declaró el zuliano a La Verdad. “Yo estoy enfocado en aprovechar cada oportunidad que me den de jugar y de hacer el trabajo. El plan es tratar de ayudar al equipo a ganar, sea con mi defensiva u ofensiva, ese es el punto principal para mí en todo momento, no estoy pensando en lo que va a pasar”.
Evolución
El buen momento que vive con el bate se manifiesta en una disminución en el porcentaje de ponches por cada aparición (de 21.9 % en 2015 a 19.4 % este año). Eso, en parte, se debe a que está haciendo mayor contacto, pues choca la bola en el 80.7 % de sus swings.
Los mejores toleteros de las Mayores son conocidos por la contundencia con la que impactan la pelota. El careta aumentó su porcentaje de conexiones fuertes de 14.1 % en 2015 a 34.7 % en esta campaña. Ese poder que ha demostrado lo ayuda a conseguir mayor cantidad de imparables que en años anteriores, pero tiene un reto mucho más grande en frente: ser constante.
NOCHE SENSACIONAL
Sandy León vivió una de sus mejores noches con el madero en las Grandes Ligas el sábado contra el archirrival de los Medias Rojas: los Yankees de Nueva York. El receptor sacó un jonrón y remolcó cuatro carreras para unirse a Jesús Montero, Víctor Martínez, Miguel Cabrera, Asdrúbal Cabrera y Bob Abreu como los únicos venezolanos en tener una jornada de ese tipo en el nuevo Yankee Stadium. “Pude conectar un jonrón ante un lanzamiento que estaba en el medio, estaba tratando de por lo menos traer una carrera”, declaró el zuliano a este rotativo. “Conseguí hacer un buen swing para pegar el jonrón”.
LVBP, LA CLAVE
El marabino ha explotado a la ofensiva este año. Un alto promedio con el madero de .452 en 21 juegos con par de vuelacercas y 13 remolcadas con los Medias Rojas de Boston así lo demuestra. Este despertar con el bate tiene su génesis, según León, con los Tigres de Aragua en la pelota criolla. “Me he sentido muy confiado y jugar en Venezuela me ha ayudado bastante. Trabajar y jugar en la LVBP con Eduardo Pérez (mánager de Tigres) y Carlos Guillén (gerente general del club) me ha servido para mejorar”, aseguró.
ENTRE ZULIANOS
Eduardo Pérez, también coach de primera base de los Bravos de Atlanta, es una de las claves para que León tenga la confianza que le ha hecho rendir frutos con los patirrojos. El citojense le pidió a Carlos Guillén que lo adquirieran vía cambio durante la campaña 2015-2016 del béisbol venezolano y luego guió al careta para firmar con Boston, a pesar de querer contar con él en Atlanta. Pérez y Guillén mejoraron su postura a la hora de batear y le recomendaron que debía evitar ser tan pasivo en el plato.
SE CONTAGIÓ
Los Medias Rojas tienen en sus filas a grandes bateadores. David Ortiz (.327 de average), Mookie Betts (.302) y Xander Bogaerts (.319) tienen algo en común y es que todos batean sobre .300 este año. Para el venezolano ha sido clave contar con la presencia de estas figuras. “Tenemos excelentes bateadores. David (Ortiz), Hanley (Ramírez), Mookie Betts, Xander Bogaerts, Jackie Bradley Jr… son buenos jugadores y bateadores. Uno aprende al verlos, al mirarlos y preguntándoles. Al final, de eso se trata, de ayudarnos los unos a los otros”.
Cifras
4.25 lanzamientos por aparición ve Sandy León, el promedio más alto de su carrera.
34.7 % de las conexiones del zuliano es fuerte, el mejor porcentaje de su trayectoria.