Los parientes de la víctima Jorge Díaz, de 35 años, aún permanecen en shock por la forma cómo lo asesinaron. Sus verdugos se ensañaron, lo apuñalearon en más de 10 oportunidades con una tijera en el pecho y luego lo asfixiaron con un cable, no conformes lo maniataron y lo dejaron dentro su habitación
Funcionarios de la Policía científica investigan el entorno del ingeniero mecánico asesinado la tarde del martes dentro de la vivienda donde residía, ubicada en el callejón Inos, del sector La Montañita, en Cabimas.
Los parientes de la víctima Jorge Díaz, de 35 años, aún permanecen en shock por la forma cómo lo asesinaron. Sus verdugos se ensañaron, lo apuñalearon en más de 10 oportunidades con una tijera en el pecho y luego lo asfixiaron con un cable, no conformes lo maniataron y lo dejaron dentro su habitación.
Nadie sabía de él desde el domingo que lo vieron por última vez, motivo por el que sus familiares extrañaron su ausencia y fueron a visitarlo el martes en la mañana, a la casa que sus amigos le dejaron al cuido desde hace seis meses, pero no salió, su teléfono estaba apagado, pero una vecina aseguró verlo más temprano, por lo que calmaron su angustia.
Sin embargo, la madre de los propietarios de la vivienda, que reside en la parte de atrás del terreno, no creyó que lo hubiesen visto porque todos los días era ella la primera en verlo salir, por lo que se acercó a la casa y logró abrir desde la parte de afuera una de las ventanas y se percató del desorden.
La intuición de que algo malo le había pasado a Díaz la llevó a llamar a sus familiares, buscó un juego de copia de las llaves y abrió, pero la puerta del dormitorio principal estaba cerrada, la empujaron y ahí estaba Jorge, en el piso, a un lado de la cama, sin vida.
Quienes lo mataron le robaron la ropa, el calzado, el teléfono celular, una tablet, la computadora, la billetera y sus documentos personales, motivo por el que para los funcionarios de la Policía científica la hipótesis que cobra más fuerza es la resistencia al robo.
Jorge era ingeniero mecánico, egresado del Instituto Universitario de Tecnología de Cabimas (IUTC), pero también era artista plástico y era la profesión que desempeñaba actualmente. Familiares y amigos lo calificaron como un hombre amigable, muy familiar y tranquilo, esperan que se haga justicia por su muerte.