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El Juego de las Estrellas de las Grandes Ligas llegó esta temporada para disputarse en Miami con sabor latino y su definición no podía ser de otra forma. El talento latino se hizo sentir cuando el dominicano Robinson Canó dio el batazo que decidió el compromiso al disparar jonrón solitario en la parte alta del décimo inning ante el relevista Wade Davis y así lideró a la Liga Americana al triunfo 2-1 ante la Liga Nacional, en el Marlins Park.
Canó sacó su poder para liderar el triunfo como gran figura de los Marineros de Seattle. De hecho, el quisqueyano se convirtió en el quinto jugador de la organización naviera a sonar vuelacercas en el Clásico de mitad de temporada, uniéndose a Ichiro Suzuki (2007), Álex Rodríguez (1998), Édgar Martínez (1997) y Ken Griffey Jr. (1992).
El joven circuito y especialmente Robinson Canó salieron por la puerta grande en la fiesta en Miami que hizo historia al convertirse en el primer Jugador Más Valioso de un Juego de Estrellas y de un Clásico Mundial de Béisbol.
“Estaba listo para cualquier pitcheo. Cualquier pitcheo que se quedara por ahí (en la zona) iba a hacer swing. La mentalidad era esa […] Es un honor estar aquí (en el Juego de Estrellas en Miami). Creo que todos son números uno aquí […] Quiero dar gracias a Dios, mi familia y a los fanáticos de Seattle (mi equipo) y de aquí en Miami”, dijo Canó tras escoger un Chevrolet Corvette como premio tras llevarse la distinción del Jugador Más Valioso. “Hace algunos Juegos de Estrellas atrás hubiese querido ganar y no se me dio, pero ahora sí. Gracias a Dios”.
Venezuela, presente
La fiesta de las principales luminarias del béisbol también contó con la presencia de peloteros venezolanos, pues José Altuve (Astros) y Salvador Pérez (Reales) salieron como titulares de la segunda base y la receptoría de la Liga Americana. Pero con el avance del juego se dieron los ingresos del zuliano Énder Inciarte (Bravos) y Avisaíl García (Medias Blancas), ambos como jardineros centrales de la Liga Nacional y la Liga Americana.
Ambos se estrenaron en el evento que reúne a las estrellas del diamante y se totalizaron cuatro nativos en play en el evento. De hecho, con los ingresos de Inciarte y García ya son 42 los venezolanos que históricamente han participado en el All Star Game de la Major League Baseball.
Fiesta en Miami
Los asistentes al Marlins Park disfrutaron una fiesta en la Pequeña Habana (Florida) y recordando la memoria de la desaparecida figura de los Marlins, el cubano José Fernández, y por supuesto el protagonismo del pelotero latino, pues el boricua Yadier Molina, de los Cardenales de San Luis, también había destacado sonando jonrón en el sexto inning para empatar la pizarra y forzando así el extrainning. Anteriormente, el quisqueyano Miguel Sanó había impulsado la primera carrera de la Nacional en el quinto capítulo.
El festival también pudo confirmar la supremacía de la Liga Americana sobre la Nacional en este evento, pues han ganado 23 de los últimos 30 y además ya han empatado el historial (43-43) entre ambas ligas.