Después
Luego de permanecer por un mes en la Unidad de Quemados del Hospital Coromoto de Maracaibo, Javier Montiel Luna, de 45 años, no pudo soportar el dolor que le generaban las quemaduras de tercer grado que tenía en el 80 por ciento de su cuerpo y falleció, ayer a las 3.00 de la tarde.
Sentado en uno de los muros rojos que rodea la morgue, José Montiel no paraba de llorar y lamentarse cada vez que recordaba la agonía de su hijo en el centro de salud. Cuando observó a los medios de comunicación acercarse hacía él, aprovechó la oportunidad para relatar cómo sucedió el accidente.
El sol de aquella mañana aún no había salido, emprender el viaje desde Caracas hasta el municipio Cabimas ameritó una salida temprana; debían llegar a tiempo para llevar la carga de envases plásticos a un establecimiento comercial. Subieron a los camiones 660 sin imaginar lo que ocurriría minutos después.
Mientras se desplazaban por el sector El Venado del municipio Baralt unos presuntos delincuentes le lanzaron una bomba molotov a la unidad pesada que conducía el muchacho. La cabina se incendió en fracciones de segundo, las llamas alcanzaron sus brazos y gran parte de su rostro, comentó José.
Un allegado a los Montiel aseguró que las organizaciones criminales que operan por el referido sector lanzan objetos contundentes y granadas incendiaras contra los vehículos que se desplazan por la carretera con el propósito de que se detengan y así perpetrar sus fechorías.