Sus compañeros de trabajo lo auxiliaron, lo recogieron del pavimento y lo trasladaron en un vehículo particular hasta una clínica. Murió 15 minutos después de ingresar tras sufrir un aneurisma cerebral
Joandry Gregorio Petit Salas, de 28 años, cambiaba la lámpara de un reflector cuando recibió una fuerte descarga eléctrica, en una construcción en la avenida Las Delicias del municipio Maracaibo.
Sus compañeros de trabajo lo auxiliaron, lo recogieron del pavimento y lo trasladaron en un vehículo particular hasta una clínica. Murió 15 minutos después de ingresar tras sufrir un aneurisma cerebral.
Lo contrataron para remodelar junto a otros dos albañiles un local entre la calle 75 y 76 de Las Delicias. Una lámpara frente al establecimiento se quemó y él salió, a eso de las 3.30 de la tarde del pasado miércoles, para cambiarla, detalló, en la morgue forense, un allegado a los Petit.
Los compañeros les explicaron a los parientes que el bombillo lo cambiaría otro albañil, pero no alcanzó la base de la lámpara. Joandry se ofreció a colaborar y al tocarla lo sorprendió una descarga eléctrica, batió las manos en el aire, perdió el equilibrio, cayó de espalda al vacío y al golpearse la cabeza quedó inconsciente.
La desesperación se apoderó de los trabajadores al verlo tirado en el suelo, comenzaron a correr de un lado para el otro, llamaron a gritos a su jefe, necesitaban que lo trasladara al hospital. Este buscó un vehículo, lo subieron, en el camino agonizaba, no podía respirar, en la clínica los médicos de guardia lograron estabilizarlo. El dolor era insoportable, el sangrado intracerebral acabó con su vida.
Adalin Rodríguez, esposa del occiso, comentó que el dueño del local la había llamado en reiteradas oportunidades para brindarle apoyo moral. “Correrá con los gastos de la preparación del cadáver, el velatorio y el entierro”.
Los compañeros de trabajo describieron al albañil como emprendedor, colaborador, honesto y responsable.