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Frente a la casa 146-12 del barrio Chiquinquirá asesinaron a Julio Prieto (37), a su hijo, Eliézer José Fuenmayor (18); y a su sobrino, Édwin Beltrán (23). La Policía investiga el asesinato como un ajuste de cuentas.
Los cuatro sicarios llegaron, a las 7.00 de la noche del pasado viernes, en dos motocicletas a la parroquia Antonio Borjas Romero. Se estacionaron a escasos metros de sus víctimas. Julio hablaba con los muchachos cuando los dos parrilleros se le acercaron, lo acribillaron a él y luego a sus dos acompañante. Huyeron. Ninguno de los vecinos ni de la familia se atrevió a seguirlos, detalló un testigo a la Policía.
A las tres víctimas las trasladaron hasta el ambulatorio de Plateja, donde los galenos certificaron la muerte. Todos tenían heridas de bala en la cabeza y en el pecho.
La mamá de Fuenmayor desconocía las causas del triple asesinato. Explicó que su hijo acaba de llegar de Carrasquero, donde vivía con su abuela, y se quedó en el frente de la casa para saludar a su padre y a su primo.
Eliézer José Fuenmayor estudiaban 5° año de bachillerato, mientras que Beltrán se desempeñaba como comerciante. Prieto tenía una tienda donde vendía ropa y presentó antecedentes por el delito de hurto.