En 13 juegos en lo que va de treintena, sin contar el duelo de ayer, liga para .205 de average, con apenas nueve hits en 44 turnos, además de solo un extrabase (doble). Mantiene sus cadenas más largas en el año sin empujar carreras ni largar cuadrangulares
Julio no ha sido la mejor etapa de Miguel Cabrera. El inicialista de los Tigres de Detroit atraviesa un momento olvidable en el plato y no ha podido ayudar a su equipo de la manera que usualmente lo hace. Nunca antes había bateado tan poco en el séptimo mes del año.
En 13 juegos en lo que va de treintena, sin contar el duelo de ayer, liga para .205 de average, con apenas nueve hits en 44 turnos, además de solo un extrabase (doble). Mantiene sus cadenas más largas en el año sin empujar carreras ni largar cuadrangulares, de ocho y 14 desafíos, respectivamente.
El mánager de los bengalíes, Brad Ausmus, no se preocupa por el slump que vive Cabrera. “Él es humano, pero saldrá de esto y cuando lo haga, empezará a batear como normalmente lo hace”, dijo el dirigente. “¿Cuánto está bateando? ¿.290, con 18 jonrones y 50 y pico de empujadas? Dios, eso es terrible”, bromeó.
Si “Miggy” no se acomoda y termina la campaña por debajo de .300 de promedio con el madero, será la primera vez no finalice con esa cifra redonda desde el 2008, cuando concluyó con .292 en su primera temporada en Detroit.