Vladimir
La salida a la crisis del país, tiene cuatro características: pacífica, democrática, electoral y constitucional, según el periodista y político Vladimir Villegas, conductor del programa de Vladimir a la 1 que transmite Globovisión.
El también locutor del circuito Unión Radio, afirma que es parte de ese 80 por ciento de venezolanos que “estamos descontentos y que creen que el país debe cambiar”.
A su juicio, Venezuela vive la hora loca de la política, porque cree que “se ha salido de la constitucionalidad y los jefes de esos errores, el dibujo libre y la hora loca de la política están en el Gobierno”.
Villegas sin ganas de ser desalentador, prevé que “tendremos un final de año muy doloroso, estas serán unas navidades muy tristes” pues considera que el Gobierno nacional es mucho más eficiente en el cumplimento de las amenazas que de las promesas.
El periodista estuvo de visita en Maracaibo invitado por la Asociación de Comerciantes e Industriales del estado Zulia (Aciz), para dictar una conferencia sobre su visión política acerca de la situación del país y la salida a la crisis.
– ¿Qué mantiene al Gobierno en el poder?
– En primer lugar lo sostienen los militares, obviamente la Fuerza Armada se ha convertido en una de sus patas fundamentales. El Gobierno lo sostiene también el hecho de ser el gobierno de un país petrolero todavía con toda la situación económica todavía tiene recursos, que tiene un gran control con los espacios de poder, un control institucional bastante severo y dentro de todo, también el pueblo venezolano está descontento y eso transversaliza la sociedad venezolana, el descontento no tiene hoy día ideología en Venezuela, no es de izquierda ni de derecha, es un descontento que tiene otras características y hay distintas visiones de cómo producir los cambios en el país, algunos errores que ha cometido la oposición en distintos momentos han contribuido a que el Gobierno tome algunos espacios de oxígeno. El Gobierno ganó el raund de la Constituyente más no ha ganado toda la batalla. El haber logrado elegir e instalar la Constituyente con todas las dudas que muchos tenemos sobre la constitucionalidad y la transparencia o no de ese proceso, el Gobierno logró su objetivo por ahora de instalar la Constituyente y de tenerla como una instancia de toma de decisiones, hasta dónde va a durar, no se sabe.
– Esos errores que ha cometido la oposición y con el descontó que menciona, ¿cree que los electores saldrán a darle respaldo a los candidatos de la Unidad el 15 de octubre?
– Creo que es mayor el descontento de los ciudadanos con el Gobierno, que el descontento de los ciudadanos con los errores de la oposición, porque obviamente hay una situación concreta de hambre, desnutrición, parálisis de la economía, inseguridad, mucha gente se ha ido del país, las expectativas de la gente son negativas a corto plazo, y también antes uno hacía la diferencia de su situación personal y la del país, hoy la situación personal se parece mucho a la percepción que se tiene de Venezuela. Comienzan a ver que la crisis los está afectando, que les puede ir mal y peor, entonces por supuesto que eso reduce el margen de juego del Gobierno. La oposición es una fuerza diversa y por tanto, tiene muchas contradicciones en su seno, eso hace difícil que tenga una estrategia coherente, hay factores desde Maduro vete ya hasta los factores que creen en el diálogo y en la negociación política, entonces eso lo observa el ciudadano.
– Específicamente, ¿qué tiene en contra la oposición para las elecciones de gobernadores?
– El ventajismo electoral del Gobierno, la no imparcialidad del Consejo Nacional Electoral, el hecho de ir en condiciones absolutamente desventajosas para este proceso, una campaña electoral muy corta, dudas con respecto a las sustituciones de los candidatos que fueron electos en las primarias, de los que deberían renunciar, y también de que dependamos en el país de lo que se le ocurra a la Constituyente, porque hace dibujo libre y no hay quién le ponga límites. Realmente estamos en una situación de fragilidad del Estado de derecho, siento que ese cristal se rompió hace tiempo, cómo nos defendemos los venezolanos de la arbitrariedad, estamos en una hora muy difícil por eso, porque además de la crisis política se le está sumando el empobrecimiento, ahora hay que escoger entre la comida y las medicinas, además vimos un proceso de empobrecimiento de los sectores medios, que le salió al Gobierno la excusa perfecta para decir que es culpa del imperio con las amenazas y sanciones, eso alimenta el caldo del Gobierno de la llamada guerra económica, pero ese discurso en la práctica tiene poco días y la situación de económica tiene mucho tiempo.
– Entonces, ¿cuál es la salida a la crisis?
– Pasa por una negociación política o por una situación incontrolable no deseada, yo prefiero optar por una negociación política, creo que es lo razonable. En este momento el Gobierno no pareciera tener necesidad urgente de la negociación política, pero creo que ese momento va a llegar, cuidado si más rápido de lo que nos imaginamos producto de la presión internacional, nosotros vivimos en un mundo globalizado y el tema de los derechos humanos toca a todos los países y Venezuela está hoy en el ojo de la comunidad internacional por las constantes violaciones de los derechos humanos. Aquí manda más un jefe de policía que un tribunal, entonces imagínate cómo se ve eso en el mundo.
– Pero, ¿el Gobierno no juega un doble papel con las negociaciones?
– Esa es la manera de como el Gobierno ha jugado. El Gobierno en ese sentido no ha tenido escrúpulos, ha utilizado el diálogo para dos cosas: para ganar tiempo y mantenerse en el poder, y para desacreditar al adversario, no hay una sinceridad del Gobierno en sus llamados al diálogo, la prueba de amor real del Gobierno en la negociación no termina de aparecer, la cual tiene que ser el reconocimiento de la Asamblea Nacional, la libertad de los presos políticos, volver a la Constitución, cambiar el modelo económico, es decir hay un conjunto de pruebas de amor y no ha concretado ni una hasta los momentos. Bueno, mandaron a Leopoldo López a su casa, pero lo que cambiaron fue el sitio de reclusión. Tenemos centenares de presos todavía, presos incomunicados, presos sin atención médica, que todo eso envía un mensaje a la sociedad, si protestas mira lo que te va a pasar. Tenemos un Estado que se la ha pasado la mano en materia represiva y lo peor de quienes gobiernan sufrieron la persecución en el pasado o en la carne de sus familiares. Yo vi al presidente (Nicolás) Maduro en un tigrito, estuvo preso en la Disip en la llamada cuarta República, fui como diputado a visitar los presos y me pegaron un grito, era Nicolás Maduro metido en un tigrito, en una celda pequeñita. Ellos les están haciendo lo mismo a los presos políticos hoy y la comunidad internacional está viendo eso.
– Si bien todo depende de la voluntad política que tenga el Gobierno con la presión internacional para poder ceder en todos los puntos que Usted señalaba en torno a la negociación, de parte de la oposición ¿qué puede ofrecer en ese proceso?
– En el caso de la oposición tiene poco que ofrecer, porque el dueño de esta fiesta es el Gobierno, para decirlo en el término de los chamos, el Gobierno es el disc jokeys (Dj) el que pone la música, pone merengue o pone sala, pone confrontación o pone diálogo. El Gobierno puso la música de la confrontación y por eso entramos en esta dinámica en todo este tiempo, pero también pasa que en la oposición hay sectores radicalizados, desesperados e impacientes que terminan cayendo en el juego el Gobierno, que incluso cuando se llamaba a la necesidad de que las manifestaciones fueran absolutamente pacífica, hubo sectores que le hicieron el juego a la violencia y terminaron cayendo en el juego del Gobierno, y que casualidad que son los mismos sectores que está estigmatizando a quienes llaman a votar. Quién celebra esa fiesta, quién trabaja para quién, están siendo tontos útiles de la estrategia de Gobierno de desmovilizar la oposición.
– ¿Cómo lograr el cambio?
– En Venezuela tenemos que buscar una salida, y la salida tiene cuatro características: pacífica, democrática, electoral y constitucional. Cuando nos salimos de esos parámetros comienzan los errores, el dibujo libre y la hora loca de la política. Creo que Venezuela ha vivido bastante la hora loca de la política y los jefes de esa hora loca es el Gobierno, pero también la oposición tiene los suyo.
– ¿Cuándo pueden aparecer las inhabilitaciones?
– Por medio de la Constituyente puede venir cualquier cosa. Estamos a su merced.
– ¿Cree que sí se den las elecciones regionales?
– Me cuesta creer que vayamos a una elección tranquila, ojala que eso termine de darse el 15 de octubre y se respeten los resultados. No me gustan las apuestas, porque no sabemos por dónde salta la liebre, hemos visto muchas cosas, dos que son muy peligrosas, la Constituyente y la llamada Comisión de la Verdad, que para mí es de la media verdad, porque no permite que en su seno se discuta integralmente lo que realmente pasó en Venezuela. Esa comisión ya tiene los culpables, es una comisión de fusilamiento político más que de búsqueda de la paz.
– ¿Cómo llegará el país a final de año con la crisis?
– La bolita de cristal la deje en Caracas, pero vamos a llegar en una situación de mayor pobreza, porque esta es una dinámica que no se detiene, el incremento de los precios y el deterioro de la vida cotidiana de los venezolanos. Tendremos un final de año muy doloroso, estas serán unas navidades muy tristes, porque este es un Gobierno mucho más eficiente en el cumplimento de las amenazas que de las promesas.
– ¿Gobierno y oposición llegarán a algún a acuerdo antes de terminar el 2017?
– Es difícil poner un plazo, el problema de quienes están reclamando un cambio de la situación del país, es que se impacientan y ponen un plazo para ellos mismos. El Gobierno no tiene necesidad hoy de llegar a un acuerdo pronto, pero puede llegar