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Su asesino lo abordó de frente y le disparó sin piedad unas 20 veces. A Starky José Fereira Bohórquez, de 34 años, lo asesinaron cuando salía del templo San Benito, en el sector El Venado de La Cañada de Urdaneta. La Policía científica maneja el caso como una venganza.
Los testigos contaron a los oficiales que Fereira, quien prestaba servicio a la Alcaldía a través de una contratista se retiraba del funeral de su tío. Caminaba por el estacionamiento de la capilla cuando el conductor de un Hyundai Elantra gris se interpuso en su camino, del vehículo bajaron dos desconocidos, quienes lo tirotearon hasta que cayó al piso.
Los homicidas regresaron al carro y huyeron. Ninguno de los vecinos ni los familiares de la víctima detallaron la placa del automóvil.
Al herido lo trasladaron al Hospital Concepción I, a una cuadra de la iglesia. Su ingreso lo registraron a las 4.30 de la tarde, presentó heridas en la cabeza y el torso. Los médicos atendieron a la víctima y segundos después confirmaron su deceso.
Los Fereira se negaron a conversar con la prensa, impidieron su acceso al centro de salud y solicitaron a los policías que los alejaran.
A Starky lo describieron sus amigos como un hombre intachable. Residía con su esposa e hijo. Era propietario de la contratista Servicios y Suministro Fereira CA, y poseía gandolas de combustible que prestaban servicio a la Alcaldía. En el Tribunal Supremo de Justicia no registraba antecedentes penales, pero sí una demanda por obligación alimentaria.
"Él no tenía enemigos; era un hombre tranquilo que vivía con su esposa e hijos. Nosotros lo conocemos desde que era pequeño. Era muy buena gente y muy querido en la zona", acotó un conocido.