
Tashfeen
Tashfeen Malik, supuesta autora junto a su esposo del tiroteo del miércoles en San Bernardino (California, EEUU), en el que murieron 14 personas, había prometido lealtad al líder del Estado Islámico (EI) en un mensaje en Facebook, según fuentes cercanas a la investigación citadas hoy por varios medios.
De acuerdo con la cadena CNN, que cita a tres oficiales vinculados a la investigación del tiroteo, Malik publicó en una cuenta de Facebook bajo un nombre falso un mensaje de lealtad al líder del EI, Abu Bakr al Bagdadi.
Por su parte, la cadena NBC, que menciona como fuente a un funcionario familiarizado con los detalles de la investigación, asegura que ese mensaje fue publicado “justo antes del ataque”, ocurrido en un centro de ayuda a discapacitados.
Mientras, el diario The New York Times, que también cita a funcionarios de la investigación, afirma que en este momento la hipótesis que predomina es la de que Malik y su esposo, Syed Farook, se autoradicalizaron e inspiraron en el EI, sin recibir órdenes directas de los yihadistas para cometer la masacre.
Las autoridades no tienen por ahora ninguna evidencia de que el ataque fuera coordinado u ordenado por el grupo extremista.
En su rueda de prensa de prensa diaria, el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, dijo no estar “en posición” de poder confirmar el supuesto vínculo entre los atacantes y el EI, ni de compartir detalles de la investigación.
El hecho de que el Buró Federal de Investigaciones (FBI) esté liderando la investigación supone que existe la “posibilidad” de que el tiroteo fuera “un ataque terrorista”, recordó Earnest, quien hoy habló en todo momento de “terrible acto de violencia”.
El presidente de EEUU, Barack Obama, afirmó ayer que es “posible” que el tiroteo estuviera “relacionado” con el terrorismo, pero que aún no se sabe con certeza, y aseguró que el FBI llegará “hasta el fondo” de lo sucedido.
En los días previos al tiroteo, que causó también 21 heridos, el matrimonio tomó medidas para borrar información de algunos de sus dispositivos electrónicos, de acuerdo con los últimos detalles divulgados de la investigación.
Por ello, las autoridades creen que el tiroteo fue premeditado y planeado con cierta antelación.
Los investigadores hallaron ayer bombas caseras y armamento en la vivienda de los sospechosos, abatidos por las fuerzas de seguridad horas después de la matanza y que en la mañana del tiroteo dejaron a su hija de seis meses con su abuela, argumentando que tenían una cita médica.
Farook, de 28 años y nacionalidad estadounidense, era musulmán y llevaba dos años casado con Malik, una mujer paquistaní de 27 que llegó al país a mediados de 2014.