Vivian Huerta vive con temor de quedar bajo los escombros y de perder todo. Cada vez que llueve alega que la cañada que está detrás de su hogar hace desastre
Vivian Huerta, habitante de la avenida 12 del sector Valle Frío de Maracaibo, asegura vivir una “pesadilla” cada vez que llueve. En la parte trasera de la casa pasa una cañada que “cuando llueve se lleva hasta los ranchos”.
El hogar de la señora Huerta está cubierto por árboles que cada vez que caen los aguaceros se inclinan más hacia donde está la casa y todos los escombros que arrastra la corriente de la quebrada reposan en su patio.
“Aquí viven tres menores. Los delincuentes hacen de las suyas, cuando llega la noche se esconden entre los escombros y árboles caídos para consumir drogas y uno no les puede decir nada”.
Los afectados solicitan a la Alcaldía de Maracaibo para que hagan las respectivas limpiezas de las cañadas “para evitar una tragedia”.