Ortega
Lilian Tintori, esposa del líder opositor venezolano Leopoldo López, en prisión desde 2014, celebró hoy la declaración de la fiscal general, Luisa Ortega Díaz, sobre la muerte del joven Juan Pernalete durante una manifestación en Caracas, y aseguró que la funcionaria “se pasó al lado correcto”.
Ortega Díaz presentó este miércoles los resultados de las investigaciones sobre muertes, disturbios y otros delitos cometidos en el marco de las protestas antigubernamentales que se han desarrollado desde hace más de mes y medio en el país, varias de las cuales desmontaron versiones difundidas por el Ejecutivo.
Entre otros, indicó que la muerte de Pernalete, ocurrida el 26 de abril en un escenario de protestas en Caracas, se produjo tras recibir el impacto de un cartucho metálico de gases lacrimógenos, con lo que desmintió la tesis oficialista de que el estudiante de 20 años había sido herido por una pistola usada en la ganadería.
“Felicito a la fiscal, apoyo sus palabras, pero también apoyo a toda la institución, a toda la Fiscalía General de la República que está actuando como debe actuar, bajo el debido proceso y de forma autónoma”, declaró Tintori en una entrevista con el canal Globovisión.
Celebró que la funcionaria, que mostró durante una conferencia de prensa un cartucho de una bomba lacrimógena que presuntamente impactó al joven, “sacó la evidencia” y “está hablando con la verdad en las manos”.
“Felicito a la fiscal general, que se pasó al lado correcto, que está actuando de forma autónoma y que a nivel internacional y a nivel nacional se está separando de una dictadura que además hoy reprime”, aseguró la activista al referirse a las manifestaciones.
Tintori celebró que Ortega Díaz “sacó la bomba que le dispararon en el corazón a Juan Pablo” y consideró que “eso es lo que Venezuela necesita: la verdad”.
“Venezuela necesita justicia, necesita democracia, necesita la verdad en las instituciones para lograr un cambio bueno para todos, no para un sector, sino para todos”, sostuvo.
El país enfrenta desde hace 55 días una ola de protestas convocadas por el Gobierno y la oposición, muchas de las cuales han degenerado en hechos violentos que dejan al menos 57 muertos y un millar de heridos.