Tristeza,
Tristeza, dolor e impotencia se sentía en el ambiente. Los padres de Sergio Bell-Smythe (20) apenas podían mantenerse en pie, al mayor de sus hijos lo mató un desconocido por no cederle el paso en la Circunvalación 2.
A las 12.00 del mediodía comenzaron a recoger los arreglos florales, los acomodaron en el carro fúnebre y la docena de conocidos y amigos se concentró en la entrada de la capilla velatoria, en el sector Paraíso. En honor al estudiante, los presentes, con flores en las manos, organizaron dos filas en la puerta de la sala. Lentamente pasó entre ellos el féretro.
El padre de Sergio luchaba. A medida que avanzaba hasta la carroza las lágrimas recorrían su rostro. Quisieron ayudarlo, pero se negó. Acomodó el ataúd y partió en caravana hasta el cementerio Jardines La Chinita. A la 1.00 de la tarde darían el último adiós al muchacho.
Injusticia
Diego, hermano menor de Sergio y único sobreviviente de la balacera, no asistió al sepelio. Un tío de los chicos comentó que a su sobrino lo operaron ayer. La bala le entró por la pierna derecha, atravesó los testículos y se alojó en el muslo izquierdo. La cirugía fue exitosa, por ahora se encuentra hospitalizado y mejorando.
El herido exalta y agradece la acción de su hermano mayor. Después del tiroteo y pese a que tenía una herida en el costado, Sergio sacó fuerza, manejó hasta una clínica y dejó que lo atendieran, luego de asegurarse que su hermano menor se salvaría.
Investigación
La Policía se apoya en las cámaras de seguridad de la Circunvalación 2 para rastrear al homicida. En las imágenes se detalla que viajaba en un Toyota Corolla New Sensation. Lo describieron como un hombre alto, de tez blanca y contextura regular. Con ayuda del sobreviviente esperan construir un retrato hablado del pistolero.