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El magnate explicó, en una entrevista con Miami Herald, lo que quiso decir en un evento el pasado miércoles cuando advirtió que una falta de liderazgo en Estados Unidos puede llevar a que el país se convierta en “una versión más grande de Venezuela”.
El empresario indicó que el Estado sudamericano tiene “tremendos problemas, incluso para conseguir comida”. Además, dijo estar “muy triste” por dicha crisis, ya que conoce “lo grandiosa que es la gente de Venezuela”. Sin embargo, dijo que usa al país “como un ejemplo”, ya que “ciertas políticas causaron esos resultados”.
El candidato también habló de lo que, en su opinión, debería hacer el gobierno estadounidense al respecto, con críticas a Barack Obama y a los líderes chavistas: “Sus líderes no son muy amigables con nuestros líderes. Pero, por supuesto, nuestros líderes no se llevan bien con mucha gente. Ciertamente, si podemos ayudar de alguna manera, deberíamos ayudar. Pero, ya sabes, ellos tienen problemas muy profundos”.
Trump también fue consultado por las comparaciones que han hecho varios analistas con el fallecido líder bolivariano Hugo Chávez, y dijo no estar al tanto del paralelo realizado, que los asemeja en estilos mesiánicos y políticamente incorrectos. A su vez, se animó a ofrecer un elogio para el caudillo: “Tenía sentimientos, algunos sentimientos muy fuertes, y representó a mucha gente que había sido dejada de lado”.
En el pasado, el empresario inmobiliario ha repartido buenas opiniones sobre polémicos líderes mundiales, como el dictador norcoreano, Kim Jong-un; el presidente ruso, Vladimir Putin, o el fallecido iraquí Saddam Hussein.