
La ruptura de una tubería madre desde hace un mes se “llevó por delante” la calle 60 entre avenidas 9 y 9A del sector Pueblo Nuevo. Los vecinos de la zona aseguran que la presión del agua potable rompió el ducto, pero esta vez también afectó el servidor de aguas negras y la instalación de gas doméstico, colocando a esa zona en alto riesgo
Elmar Pelekai, residente del sector y primer afectado, porque el boquete esta frente a su casa, manifestó que “ya tenemos cuatro semanas con esta situación al punto que tuvimos que trancar la calle, porque por acá pasan vehículos pesados y no sabemos la debilidad del pavimento que podría crear un mal mayor”.
De acuerdo a vecinos, esta es la cuarta ocasión que sucede la rotura con el socavamiento de la calle y sus temores aumentan porque se tardan demasiado en solucionar el problema.
José Bracho, habitante y afectado, explicó que está “preocupado por que ahora se unió el agua blanca con la negra y el gas metano que no llega bien a las casas y se vé como también se despilfarra. Esto es una calamidad”.