Chile eliminó ayer a Portugal en semifinales de Copa Confederaciones, a través de tanda de penales donde Claudio Bravo tapó tres. El encuentro fue de ida y vuelta. Aunque Portugal dominaba no lograba ser efectivo de cara al arco, mientras que Chile con las pocas pelotas que tenía lograba incomodar más el arco portugués
Rara vez un portero es el héroe de un equipo, pero cuando ocurre es simplemente espectacular. Ayer pasó. El guardián del arco chileno, Claudio Bravo, atajó tres lanzamientos seguidos a la selección de Portugal en la tanda de penaltis y le dio a su país la primera clasificación a una final de la Copa Confederaciones en toda su historia y la tercera en tres años consecutivos, contando las dos últimas Copas América, donde se coronó campeón.
El partido no fue fácil. Los portugueses supieron incomodar. De hecho, por varios instantes del partido se mostraron muy superiores a los sudamericanos. Sin embargo, no lograban concretar las jugadas que generaban y "La Roja", con menos tenencia de la pelota, creaba jugadas más peligrosas para el arco de Rui Patricio.
La estrategia de los chilenos fue anular a Cristiano Ronaldo desde un principio, algo que hicieron efectivamente. El crack del Real Madrid no tuvo ocasiones para batir a Bravo, algo que provocó que el equipo dirigido por Fernando Santos se convirtiera en una especie de conjunto estéril, pues es Cr7 es, de lejos, el máximo referente goleador de su equipo.
El encuentro fue un ida y vuelta constante durante los 90 minutos, pero las jugadas más emocionantes se produjeron en el tiempo extra, donde Chile tuvo varias oportunidades, donde resaltó una jugada cerca del final donde el mediocampista Arturo Vidal rompió el poste con un zapatazo y en el rebote uno de sus compañeros la envió al travesaño.
Parecía que el destino quería que los lusos clasificaran, no obstante, no sería así. En los penales cobraron por Chile: Vidal, Charles Aránguiz y Alexis Sánchez, todos con lanzamientos formidables. Por el campeón de Europa tomaron la responsabilidad: Cuaresma, Moutinho y Nani, quienes si bien es cierto no patearon mal, el portero del Manchester City tuvo tres paradas inolvidables, que metieron a los campeones de América en su primera final de este campeonato y que lo convirtieron en el segundo arquero que no recibe goles en una tanda de penales en torneos de selecciones tras el paraguayo Justo Villar en la Copa América de 2011.
Ahora los pupilos de Juan Antonio Pizzi, deberán esperar por el segundo clasificado a la final que se decidirá hoy (2.00 pm) entre Alemania y México.
"Merecemos estar en la final. Tuvimos más ocasiones que Portugal, sobre todo en la prórroga (…) Mostramos un corazón muy grande y un compromiso muy grande para defender nuestra propuesta", expresó Pizzi visiblemente emocionado tras culminar el encuentro.