Una bala le trunca los sueños

Los vecinos se acercaron a la casa de los Bucobo para consolarlos. (Foto: Dabelis Delgado)

José David Bucobo Villalobos (17) se resistió a entregar su BlackBerry. Los ladrones viajaban en un Kia Río blanco y le dispararon por la espalda cuando corrió. Los familiares comentaron que el liceísta no quería morirse. Quería terminar su tesis para mudarse con su padre a Estados Unidos. No culminó su proyecto

A José David Bucobo Villalobos, de 17 años, le dispararon por la espalda tras negarse a entregar su celular a unos delincuentes en una vereda diagonal a la unidad educativa Francisco Esparza, en la urbanización Pomona.

Los familiares contaron que el liceísta salió a las 7.00 de la mañana de su casa, en la avenida 19 E, para reunirse con un amigo. Trabajaban en su tesis, porque ya estaban próximos a graduarse de bachilleres. 

Mientras el joven esperaba que su amigo desayunara, unos delincuentes aparecieron en escena, se detuvieron y le exigieron que le entregara el celular. José David se metió su BlackBerry al bolsillo y soltó su morral, pero preso del miedo corrió hacia un estacionamiento. Los atracadores lo siguieron y para detenerlo le dispararon en la espalda. 

Al escucharse la detonación, los vecinos se asomaron por las ventanas de las casas y vieron al muchacho tirado sobre el asfalto. Alguien lo reconoció y avisó a sus familiares. Su primo, Wílmer Paz, salió de prisa en su auxilio. 

“Lo levanté y gracias a un vecino que sacó su carro, lo llevé al Hospital General del Sur, estaba vivo y me dijo que le dolía mucho, que no se quería morir, yo le dije: ‘Tranquilo, resiste, todo va a salir bien, vas a salir de esto’”, contó su primo, aún con un nudo en la garganta. 

Bucobo llegó vivo a la emergencia. Los médicos lo enviaron al pabellón, la bala le perforó la columna, el hígado y la vena aorta. Intentaron salvarlo, pero el joven no resistió, murió a las 10.00 de la mañana. 

Sus familiares no podían creer lo que sucedía. Fue un golpe repentino y muy fuerte, apenas lo vieron salir de su casa para estudiar cuando minutos después les anunciaron la tragedia. 

Quienes lo conocieron estaban muy consternados, pero, al mismo tiempo indignados, ya que denunciaron que desde hace ya semanas, una banda de hampones los azota. 

“La semana pasada pasaron unos en un carro y le hicieron unos tiros a una familia en una casa, también atracan a toda hora, en este sector estamos desprotegidos”, increpó una vecina. 

SUS SUEÑOS 

José David Bucobo Villalobos aspiraba a graduarse de bachiller y cumplir su mayoría de edad para emigrar a Estados Unidos para trabajar y vivir con su papá. 

 

 

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