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La pequeña Yubiré Vanessa Alarcón Ramírez (8) falleció, el miércoles a las 7.00 de la mañana, en una habitación de la Unidad de Quemados del Hospital Coromoto. La recluyeron, el 6 de agosto, con el 95 por ciento de su cuerpo quemado.
Sofía Ramírez, su madre, contó que encendía, el pasado sábado a las 3.00 de la tarde, una brasa para bañar a la menor de sus hijos, porque tiene una erupción en la piel. Yubiré, acompañada por su hermana (13), veía desde un rincón de la cocina de la vivienda, en el sector Lazo de la Vega, Valera, estado Trujillo.
La adolescente le recomendó a su mamá echarle gasolina para que el fuego se prendiera más rápido. Ramírez tomó una tapa con gasolina y la arrojó a la brasa. “Las llamas crecieron y una chispa cayó al envase de gasolina”.
El fuego, recordó la mujer en la morgue, se propagó por toda la cocina. Sofía corrió para afuera junto a una de sus hijas. Yubiré se quedó adentro y las llamas le arroparon su diminuto y delgado cuerpo. Le echaron dos baldes de agua, pero “fue peor”, aseguró el médico que la atendió en el hospital de Valera.
Una vecina arropó con un paño a Alarcón y la trasladó hasta el centro hospitalario y a las 9.00 de la noche, en una ambulancia, la remitieron al Coromoto. Veinticinco días permaneció intubada. Solo en momentos abría los ojos y movía los brazos cuando su madre le hablaba.
“Pero el domingo comenzó a desmejorar” y el lunes en la mañana, el portero del hospital llamó a Sofía. La mujer pensaba que era para ver a la cuarta de sus cinco hijos, caminó y se topó con estas palabras: “Mami lo siento, ella falleció”.
La mujer no lo creía, y subió a otro piso, donde está hospitalizada una amiga del esposo, para que la acompañara a entrar a la habitación, donde su niña permanecía muerta.
Se presume que un paro respiratorio terminó con la vida de la estudiante de primer grado. El funeral está planeado para hoy en la casa de la abuela paterna, en Trujillo.
“Le gustaba alabar a Dios”
Sofía describió a Yubiré Vanessa como una niña alegre, le gustaba danzarle a Dios en la congregación cristiana La Voz de Dios, donde pertenecen desde hace unos años.