sábado, enero 18, 2025
InicioUna ciudad en...

Una ciudad en la oscuridad

-

La problemática radica esencialmente en la ausencia de atención y vigilancia de las diversas plantas eléctricas, establecidas en diferentes zonas del país

Desde los sectores El Jazmín y la Gilcón en La Limpia, hasta Villa Venecia en Fuerzas Armadas, la Urbanización Monte Bello, Las Camelias, Villa Arcoiris  y Costa Rosmini en la parte norte, tempestivamente, sin aviso alguno, se ausenta la electricidad, dejando zonas populosas de la ciudad a oscuras con sus profundas calles y avenidas sombrías, como si de repente se avecinara una atronadora tormenta y los habitantes espantados, enmarañados, caminen como muertos ambulantes, como fantasmas alucinados o espectros atormentados. Esa es la penumbra, la negritud de las sombras, las cavernas urbanas, el retroceso social, la inhumanidad manifiesta, el olvido  premeditado y cruel.

Cada día de este año lleno de grises presentimientos se va la luz y  la oscuridad dura de dos a cinco horas. La incertidumbre de desconocer en qué instante desaparece, genera angustia, estrés y pánico, zozobra, preguntando los vecinos con vos de ataúd, desgarrada por dentro ¿otra  vez se fue la luz?; ¿por qué se ha ido tres días seguidos?; ¿qué está haciendo el Gobierno ante la falta de electricidad en el Zulia?. No hay repuesta concreta, sólo que son fallas comunes de rutina.

De acuerdo con reportes de Corpoelec, los constantes apagones son ocasionados, debido a que las principales plantas generadoras de electricidad no están funcionando como deberían, por la falta de mantenimiento preventivo y consciente en sus centros operarios, una muestra evidente son las instalaciones Ramón Laguna, ubicada en el sector Los Haticos, la cual está prácticamente paralizada, al interrumpir sus funciones, cuando sus transformadores con débil actividad, experimentan continuos cortocircuitos a causa de las recientes lluvias, con vientos huracanados y la creciente demanda eléctrica por las altas temperaturas existentes, agudiza la situación.

La problemática radica esencialmente en la ausencia de atención y vigilancia de las diversas plantas eléctricas, establecidas en diferentes zonas del país, las cuales han sido olvidadas en el tiempo, sin control, organización e inyección de inversiones, ocasionando que no se produzcan megavatios necesarios en las unidades generadoras para atender las exigentes necesidades de una sociedad en expansión, sometida a condiciones climáticas severas y dramáticas, propias del cambio climático y su incierto devenir.

La crítica realidad de no poder producir los megavatios requeridos para satisfacer las diversas exigencias eléctricas determina el desplome y la ineptitud actual, desencadenando el incremento excesivo de cortes en el suministro con un racionamiento irresponsable, irregular, desfasado  de las horas de un cronograma establecido con responsabilidad y respeto social, tomando los apagones a la colectividad por sorpresa; en los momentos con las más altas temperaturas, estando desprevenidos e impotentes, quedando atrapados en apagones brutales que también apagan y sumergen en la oscuridad el derecho a contar como ciudadanos con una ciudad clara e iluminada, propia de las civilizaciones avanzadas.

Visited 4 times, 1 visit(s) today
- Publicidad -

Lo Más Leido