Según la médico internista de la unidad, los aires están en reparación hace ocho días. Un ambiente frío es necesario para proceder con las curas, pues minimiza la cantidad de gérmenes
Los pacientes de la Unidad de Pie Diabético del Hospital Universitario de Maracaibo tienen ocho días sin ser atendidos para sus curas por falta de acondicionadores de aire.
La falta del equipo refrigerador aqueja a los 60 pacientes que frecuentan la especialidad, sobre todo por el retraso en sus curas y el gasto que amerita el traslado en transporte privado. “Es difícil asistir a la consulta y que te digan que no habrá porque no hay aire”, reclamó Lesbia Montero, usuaria de la unidad. Los enfermos no tienen certeza de si serán atendidos y van a diario con la esperanza de que el aire esté arreglado.
Dependiendo de la evolución de la enfermedad, los afectados pueden requerir hasta dos limpiezas semanales y la única alternativa que tienen, a falta del recinto, es buscar la cura en otros centros de salud o con enfermeras particulares.
“Las enfermeras me cobran hasta dos mil bolívares por el tratamiento y necesito hacerme dos”, contó Montero a este rotativo. La mayoría de los pacientes que asiste a la Unidad de Pie Diabético del HUM carece de recursos para costear los gastos por métodos de pago.
En marcha
Eulalia Seguín, médica internista de la Unidad, aseguró que los acondicionadores de aire están en reparación desde ayer y hasta el martes no habrá cita. Mientras tanto, harán la supervisión del correcto funcionamiento de los equipos para garantizar la solicitud.
“Dependiendo de la situación de los aires, atenderemos el martes a los que están citados”.
La baja temperatura es necesaria para proceder con la limpieza de las zonas afectadas del paciente, pues permite que se reduzca la proliferación de las bacterias. Desde el pasado viernes, las consultas en la Sala de Cura se suspendieron.
“El aire, desde que se instaló, no se había dañado”, explicó la experta y mencionó que esta falla está aislada a la que hubo en los consultorios, cuando luego de dos años sin los acondicionadores, los arreglaron.
60 pacientes frecuentan la Sala de Cura de la Unidad de Pie Diabético