Ningún pelotero nativo se había alzado con el premio en la Liga Nacional desde 2010, cuando "CarGo" lo ganó por primera vez, en una zafra coronada por su título de bateo
Los venezolanos no se conformaron con ganar tres Guantes de Oro. Ayer premiaron a Carlos González (OF), José Altuve (2B) y Miguel Cabrera (1B) en la entrega de los Bates de Plata, debido al alto desempeño que cada uno mostró en la caja de bateadores durante la recién terminada campaña de Grandes Ligas.
Este año, con el trío de maderos plateados, marcó un hito en cuanto a este galardón para toleteros criollos. Es apenas la segunda ocasión que tres figuras nacidas en esta tierra ganan la distinción en una misma temporada. En 2004, lo consiguieron Melvin Mora (3B), Víctor Martínez (C) y Bob Abreu (OF).
Ningún pelotero nativo se había alzado con el premio en la Liga Nacional desde 2010, cuando "CarGo" lo ganó por primera vez, en una zafra coronada por su título de bateo. Ahora el zuliano, más que por su promedio de .271, destacó por los 40 jonrones y las 97 carreras que empujó en 2015.
González se sobrepuso a un flojo inicio de temporada, en el que apenas registró average de .245, con 10 vuelacercas y 28 remolcadas en sus primeros 70 juegos del año. Posterior a eso, su promedio al bate fue de .292, sacó 30 pelotas del parque y produjo 69 anotaciones.
Repitieron
Al explotar y establecerse como uno de los mejores intermedistas del juego, Altuve se llevó el Bate de Plata en 2014 y nuevamente superó a todos los defensores de la segunda base, en cuanto este galardón. Solo Jesús Marcano Trillo repitió entre camareros venezolanos (1980-1981).
El habilidoso bateador fue uno de los dos hombres con al menos 200 indiscutibles en las Mayores, junto con Dee Gordon. Terminó con porcentaje ofensivo de .313, pegó 40 dobles, cuatro triples y 15 cuadrangulares.
Altuve es el tercer jugador en la historia de los Astros de Houston en hacerse con este premio y el Guante de Oro en la misma campaña. También lo hicieron Craig Biggio (1994, 1995, 1997) y Jeff Bagwell (1994).
Para Miguel Cabrera, único criollo en ganarlo en ambas ligas, fue su sexto Silver Slugger. "Miggy", pese a que únicamente disputó 119 compromisos, obtuvo el cuarto cetro de bateo en su carrera, al ligar para .338. Coleccionó 47 extrabases y envió a 76 compañeros al plato.