Luis
Y sería en la calle 88 de Santa Lucía donde nacería, un 5 de noviembre de 1947, Luis Guillermo Arias Franco. En ese mismo sector crecería y se convertiría en parte de la historia de una localidad que lo ha acogido como unos de sus más populares personajes. Hoy, en su cumpleaños número 69, La Verdad muestra al hombre que por más de 40 años ha estado detrás del mostrador del afamado establecimiento Pa Que Luis, al servicio de sus visitantes. Con una trayectoria que le ha valido el reconocimiento a lo largo y ancho del estado y de todo el territorio nacional, Luis se consagra hoy día como un ícono de la zulianidad.
Hombre de pocas palabras y de notable timidez, aunque con un sentido del humor y dialecto que dejan en evidencia al “maracucho de pura cepa” que lleva dentro. Así es Luis, sin mucho que decir, pero con la disposición de hacer de una tertulia un agradable encuentro y ocasionar en su acompañante unas cuantas carcajadas, esas que provoca en el otro sin mucho esfuerzo y que nacen de los chistes que saca de cada situación. Desde las escaleras de su negocio, ese de paredes amarillas y azules y sobre las que reposan fotografías de un sinfín de artistas que han visitado el lugar, dijo sentirse “más que agradecido con la vida y con Dios por todo lo que he alcanzado”. Casado en tres oportunidades y con cuatro hijos, confiesa que han sido “unos buenos 69 años”. Luis Guillermo, Kreglia Alejandra, Sabrina Alejandra y Luis Eduardo son el fruto de su primer y tercer matrimonio; este último aún vigente. “Esa mujer todavía me aguanta”, dijo entre risas.
¡Vamos todos pa’ que Luis!
Así dice la gaita que en 1987 compusiera Arcadio Martínez e inmortalizara en su voz Osías Acosta, en compañía del conjunto Gaiteros de Pillopo. “La gaita cumple este año 29 años de su salida a la luz. Yo creo que ni ellos mismos pensaron que la canción tendría tanto éxito”. Destacó que de no existir esos versos y estribillo que describen acertadamente a su local, su éxito no sería el mismo. “Gracias a esa gaita es que la gente fuera del Zulia me conoce. Voy a otros estados y la gente sabe quién soy. Me piden que ponga una franquicia del negocio en cada lugar al que voy”.
Cuarenta y ocho años tiene el establecimiento que llena de música y alegría una de las esquinas más concurridas de Santa Lucía. La gaita, la algarabía y el ambiente decembrino que desprende del lugar, hacen de la zona uno de las más visitadas por residentes del sector y por turistas que desean ansiosos conocer el popular Pa’ que Luis. “Aquí hay gaita todo el año. Yo no hago la bajada de los furros –actividad tradicional en noviembre- porque nunca los he subido. Yo procuro mantenerlos siempre abajo y mantener mi gaita zuliana sonando”.
Humildad, sentimiento y arraigo
Esas características son las que definen a Luis, quien dice no querer ni necesitar más reconocimiento. “No me gustaría ser más famoso o reconocido. Así estoy bien. Con lo que tengo me basta y me sobra”. Con una extensa lista de amigos y vecinos que al pasar por su local levantan el grito: ¡Epa Luis!, ¿cómo estáis mijo?, afirma que lo más valioso que le ha dejado su trayectoria son las amistades. “Muchos amigos. Eso es lo que más me ha dejado todo esto y es lo que más disfruto. No hay nada más bonito para mí que una amistad”. Sentimiento, arraigo y amor por su gentilicio es lo que acompañan su día a día. “Soy un maracucho de corazón. Me encanta la gaita, mi tierra y mi gente”.
“Soy un maracucho de corazón. Me encanta la gaita, mi tierra y mi gente”
PERFIL
Luis Arias
Maracaibo
69 años
Sexto grado de Educación Básica. Realizó cursos de contabilidad durante su adolescencia.