Exigen
No tuvieron miedo. Ayer un grupo de jubilados petroleros de Cabimas se apostaron frente a la puerta de entrada del edificio administrativo de Petróleos de Venezuela (PDVSA) La Salina. La protesta fue en todo el país y se debe al retraso en la cancelación de los intereses del fondo de pensiones correspondientes a 2014. Son cerca de 27 mil los afectados en todo el territorio.
Exigen el aumento de la pensión asignada para cada jubilado. A ellos les cancelan cinco mil 622 bolívares. Alfonso Bejarano, quien tuvo 14 años dentro de la industria petrolera, explicó que PDVSA viola la cláusula 21, numeral tres, de la convención colectiva, que reza que el pago por este concepto debe quedar establecido por el mismo monto que emite el Ejecutivo nacional por vía de decreto presidencial.
“Nos pagan casi menos de dos mil bolívares quincenales y 12 mil por la Tarjeta de Alimentación. Esto es insuficiente. PDVSA nos debe respeto. Fuimos personal de esta empresa que dimos la vida por ella y ahora nos maltratan con el pago de nuestros beneficios que nos corresponden por ley”, insistió Bejarano.
La protesta la respaldaron los petroleros activos. Jairo Sibada, es uno de ellos. “Apoyamos esta acción porque es justa. Los jubilados son personas que trabajaron por levantar la industria petrolera y se les debe respeto”.
Héctor Díaz Sánchez, quien trabajó por 35 años en PDVSA, comentó que aún desconocen cuánto es el dinero recuperado de los 530 millones de dólares que malversó Francisco Illarramendi, gestor de capital de riesgo venezolano-estadounidense que fungió como asesor de finanzas de PDVSA, y quien fue sentenciado a 13 años de cárcel por un fraude piramidal, en el que gran parte del dinero pertenecía al Fondo de Pensiones de la estatal venezolana.
“No queremos palabritas, queremos que nos cumplan. Los cierres económicos los hacen los 31 de diciembre y es fecha que aún no nos dicen absolutamente nada. De no salir humo blanco, arreciaremos las protestas”, advirtió Díaz Sánchez.