En el Juventus Stadium de Turín, el cuadro italiano se ha impuesto con absoluta superioridad gracias a los goles de Marchisio, que abrió temprano la cuenta, luego Higuaín y finalmente ha sido Paulo Dybala el encargado de poner la cereza en el pastel
Faltan más de 10 fechas para el fin de temporada en la Serie A. Sin embargo, las cosas parecen estar muy claras: a la Juventus, de Tomás Rincón, no la para nadie. El Palermo ha fungido el papel de su nueva víctima con una derrota de 4-1
En el Juventus Stadium de Turín, el cuadro italiano se ha impuesto con absoluta superioridad gracias a los goles de Marchisio, que abrió temprano la cuenta, luego Higuaín y finalmente ha sido Paulo Dybala el encargado de poner la cereza en el pastel.
El Juventus, que con la victoria asegura, al menos, mantener la renta de nueve puntos en el liderato respecto al Roma, segundo, sumó ante el antepenúltimo de la tabla, amenazado por el descenso, su sexta victoria seguida.
El conjunto de Massimiliano Allegri, que tiró de rotaciones en su plantilla para el choque, terminó con la resistencia de su rival a los 13 minutos, cuando Claudio Marchisio aprovechó un mal despeje del meta visitante, el croata Josip Posavec, para llevar el balón a la red.
Antes del descanso, el campeón amplió su ventaja gracias a un golpe franco perfectamente transformado por Dybala. Y pasada la hora de juego, Higuaín llegó a su cita con el gol. Recibió un pase de Dybala y sentenció el choque. Es su duodécimo tanto en los últimos 10 partidos.
Fue Dybala el que redondeó la goleada turinesa tras culminar un buen pase de Higuaín. En el tiempo añadido, el búlgaro Ivaylo Chochev hizo el gol del honor visitante.