La nueva zona de embarque tendrá la capacidad para 6 millones de usuarios, y contará con 22 puertas de embarque con lectores de código QR
El aeropuerto de Roma-Fiumicino contará desde este miércoles con una nueva zona de embarque con capacidad para 6 millones de pasajeros anuales a los que ofrecerá, entre otras novedades, la posibilidad de escuchar un pódcast sobre su destino mientras esperan ingresar al avión.
Las obras para esta ampliación, reservada a vuelos nacionales y de zona Schengen, han costado 500 millones de euros y se enmarcan en la apuesta del Gobierno italiano por potenciar este aeropuerto romano, también conocido como Leonardo da Vinci, como el punto de referencia para el transporte aéreo en el sur de Europa.
Esta área, que incrementa la capacidad de su terminal 1 del aeropuerto, se inaugura diez meses después de otra intervención que amplió sus instalaciones en 37.000 metros cuadrados, equivalentes a cinco campos de fútbol.
Acceso de pasajeros
La nueva zona de embarque, de 25.000 metros cuadrados, contará con 22 puertas de embarque, todas ellas automatizadas con lectores de código QR para agilizar el acceso de pasajeros.
Además, cada puerta de embarque contará con un código digital para que los pasajeros puedan descargarse un pódcast con información sobre el trayecto y el lugar de destino, la primera entrega de una serie de programas que la instalación ofrecerá en el futuro a los viajeros.
“Es un paso importante en el gran programa de inversiones de Aeroporti di Roma por valor de 10.000 millones de euros de aquí a 2046 -de los que ya se han completado 2.500 millones-, que ha llevado a Fiumicino a la élite mundial en términos de calidad de servicio”, indicó en un comunicado Marco Troncone, el consejero delegado de la entidad gestora Aeroporti di Roma que forma parte del grupo Mundys.
El Leonardo da Vinci es el primer aeropuerto por número de pasajeros en Italia, con 30 millones de personas en el 2022, y el segundo en mercancías, solo por detrás de Milan Malpensa.
Rutas transitadas
Barcelona, Madrid y París son sus rutas más transitadas en Europa mientras que Tel Aviv (Israel), Nueva York (EE. UU.) y Dubái (Emiratos Árabes Unidos) lideran en viajes internacionales.
En las últimas semanas amplió su zona de recogida de equipajes, de la que se beneficiarán 3 millones de pasajeros anuales, y también instaló un sistema de escáneres en los controles de seguridad por los que ya no se obliga a sacar los líquidos y los productos tecnológicos.
Así, las personas que viajen desde Roma pueden llevar en sus maletas de mano líquidos sin tener que respetar el límite estándar de los 100 mililitros, con excepción de los que se dirijan a Estados Unidos e Israel, sometidos a procedimientos de seguridad específicos.
El grupo de transportes Mundys, antes conocido como Atlantia, enmarcó estas obras en las labores de modernización de las infraestructuras en Italia, y también en Roma, capital que en 2025 celebrará el Año Jubileo y en 2030 la Expo internacional.
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