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Las recientes lluvias han generado que se agudice el desbordamiento de aguas negras en el sector El Solito, de Cabimas. Los vecinos señalan que la fetidez no les permite estar tranquilos, exigen ayuda del Ejecutivo local o tomarán acciones de calle. Uno de los colectores de la zona tiene años que perdió su tiempo de vida de útil por lo que piden con urgencia sea sustituido a corto plazo. Los afectados señalaron que desde hace al menos 10 años tienen el problema y nunca los han tomado en cuenta en los presupuestos anuales.
Cuadrillas de la Alcaldía solo llegan al sector cuando deben achicar las aguas residuales estancadas, de lo contrario ignoran la magnitud del malestar que afecta directamente a unas 20 familias. Camila López, ama de casa, manifestó su deseo de mudarse, aún cuando está consciente de que la situación económica no se lo permite. La dama contó que conviven con el mal olor día y noche, y aunque las puertas y ventanas permanecen cerradas, el olor penetra todo el lugar. Señaló que hay casos de alergia y problemas respiratorios. “Solo queremos vivir con un poco de tranquilidad, sentarnos en el frente de nuestras casas sin ningún problema y respirar aire limpio”.
El bote de aguas negras, aunque es permanente durante el período de lluvias, empeora la calidad de vida de los afectados. Cuando colapsan las tuberías, se desbordan las aguas residuales dentro de las casas y en ocasiones se han mezclado con las tuberías de aguas blanca. El estancamiento también ha generado que la carretera se haya corroído y esté en mal estado. “Es un problema que no podemos dejar pasar por las consecuencias que nos trae, necesitamos que el alcalde Félix Bracho, venga y vea cómo vivimos”.